El Partido Animalista Con el Medio Ambiente (Pacma) ha instado al Ayuntamiento de Zuera (Zaragoza) a tomar medidas «inmediatas» para poner fin a los eventos taurinos, después de que un toro se haya roto un cuerno en un «descontrolado» evento de este tipo, durante las fiestas locales celebradas este fin de semana.
Pacma ha señalado en un comunicado que este «doloroso incidente» muestra la necesidad «urgente» de replantear la celebración de actos taurinos, a los que califican de «crueles y arcaicos». En su lugar, piden fomentar actividades culturales y de entretenimiento que no impliquen a los animales.
El toro herido ha sufrido una fractura en uno de sus cuernos, «un trauma físico» que pone de manifiesto la «falta de control y la brutalidad de estas celebraciones». Se desconoce su estado de salud actual.
Las imágenes del incidente han sido difundidas a través de las redes sociales del partido animalista, que ha condenado de forma «enérgica» este acto de «crueldad» y ha pedido al Consistorio de Zuera que reconsidere su apoyo a eventos «que ponen en peligro la integridad física y emocional tanto de los animales como de las personas».
Asimismo, ha criticado al Gobierno de España por no abolir los festejos taurinos en los últimos cuatro años y ha lamentado que la Ley de Protección Animal, que entrará en vigor este 29 de septiembre, excluya a los animales utilizados en el ámbito de la tauromaquia.
Mala imagen de españa
El presidente nacional de Pacma, Javier Luna, ha asegurado que «se esta dando una muy mala imagen de España en el exterior por nuestras tradiciones crueles con animales», y ha agregado que «el Gobierno de España debe impulsar los cambios legislativos necesarios para que esto deje de ocurrir».
«El dolor y el sufrimiento que experimenta un toro al romperse un cuerno no pueden subestimarse porque es una parte de su cuerpo que se encuentra inervada», ha apuntado.
Según informes veterinarios, las lesiones en los cuernos de los bovinos pueden causar un dolor agudo y crónico, así como estrés, ansiedad y trauma psicológico. «La crueldad inherente en la celebración de festejos populares que ponen a los toros en situaciones de riesgo como esta no puede ser pasada por alto», han aseverado desde la formación política.