La Policía Local ha detenido en Elche (Alicante) a un hombre de 48 años por quebrantar la orden de alejamiento que tenía sobre su exmujer tras entrar en el edificio de ella y ser observado por una patrulla de seguimiento de la víctima.
Los agentes también subieron a la vivienda de la mujer para comprobar que se encontraba bien, pero sus hijos les impidieron la entrada. Finalmente, el hombre salió de forma voluntaria y fue arrestado.
Los hechos se produjeron el pasado 2 de agosto en el barrio de Los Palmerales de Elche, informa este miércoles el Ayuntamiento en un comunicado.
Una patrulla de seguimiento de víctima de violencia de género de alto riesgo se percató de lo sucedido al observar que el hombre, tras ver a los agentes, entraba esquivo en el inmueble.
Seguidamente, los efectivos fueron a tocar a la puerta de la mujer para comprobar que se encontraba en buen estado. Fue entonces cuando los hijos de la expareja no dejaron entrar a los agentes en la vivienda y les dijeron que sus padres no estaban en el interior.
Después de que los agentes hablaran con los hijos y recabaran más datos, el hombre salió voluntariamente de la casa. Manifestó que sabía que tenía una orden de alejamiento, pero que su mujer no estaba en casa y que sus hijos le habían invitado a comer.
Al no poder comprobar esta versión, los policías realizaron varias llamadas al número de la víctima, pero daba apagado. Por este motivo, el hombre fue detenido y trasladado a dependencias policiales.