La renovación integral de las calles San Íñigo y San Benito de Calatayud comenzará este jueves, 17 de agosto, una vez finalizadas las fiestas de San Roque de la ciudad. Esta actuación permitirá la sustitución de redes y pavimentación, trabajos que tienen un plazo de ejecución de 16 semanas y un presupuesto de 221.412 euros.
La empresa Primos Bílbilis se hará cargo de esta renovación integral bajo la dirección del arquitecto Luis Lario, ha informado el Ayuntamiento de Calatayud en una nota de prensa. La actuación transformará dos calles y se acometerá, a la vez, como un proyecto único, para reducir las afecciones y molestias.
Estas obras supondrán cambios en la movilidad de esa zona de la ciudad y afectará a los accesos a los párquines. De esos cambios en las direcciones, del cierre al tráfico de esas calles y de los estacionamientos se irá informando puntualmente conforme se desarrollen los trabajos.
Además, hace unos días se explicó a los vecinos y responsables de negocios de esas calles en qué iba a consistir la reforma y cómo iba a repercutir en la movilidad. Se tratará de que el acceso a los garajes esté impedido el menor tiempo posible, han apuntado las citadas fuentes.
Las obras se van a ejecutar en tres fases o tramos. La primera se llevará a cabo en la Calle San Íñigo, entre las de San Benito y Pablo Remacha. A continuación, se actuará en otro tramo de la Calle San Íñigo, entre las calles Doctor Fléming y San Benito. Finalmente, se emprenderá la obra en la Calle San Benito.
Cambio de redes y pavimentos
Todas las redes de esas dos calles se van a cambiar. Las de saneamiento, que han sufrido varias roturas, las de abastecimiento, y las que recogen las aguas pluviales. Estas últimas, además, se ampliarán para dotarlas de mayor capacidad de evacuación y evitar así la formación de charcos.
Los pavimentos de estas dos calles se van a sustituir por adoquín de hormigón, similar a los de la Plaza Correa y Costa. Esta sustitución no solamente solucionará los desperfectos y hundimientos que presentan en la actualidad, sino que el proyecto contempla mejoras en la accesibilidad de los peatones.
Con esa finalidad, se creará una plataforma única, adaptando la zona para personas con movilidad reducida y discapacidad visual. También se dotará de más anchura a las aceras, en aquellas zonas en las que las dimensiones de la vía lo permitan.
Esta actuación se aprovechará para hacer una preinstalación que permita el soterramiento de cables que tanto afean fachadas y exteriores. Destacará en esta reforma de las calles San Iñigo y San Benito la instalación de mobiliario urbano y la plantación de arbolado, del que ahora carecen. En definitiva, se trata de crear un espacio urbano más atractivo, cómodo y humano, que invite al paseo y favorezca la actividad comercial.