El diputado de ERC en la Diputación de Barcelona, Dionís Guiteras, ha asegurado que «todo el mundo» en el partido está satisfecho con el pacto en el ente supramunicipal para que los republicanos entren en el gobierno de PSC y comuns liderado por la socialista Lluïsa Moret.
«Todo el mundo está contento y satisfecho de entrar en el gobierno de la Diputación porque venimos a trabajar y porque en los ayuntamientos hay muchas necesidades», ha dicho declaraciones a los periodistas tras el pleno de este miércoles --en el que se ha aprobado el cartapacio municipal--, preguntado por las críticas de algunos alcaldes y concejales republicanos.
Aun así, ha añadido que «solo faltaría que todo el mundo estuviera de acuerdo, sería un partido stalinista y no es el caso», y ha defendido que la incorporación de ERC en el gobierno hará que la diversidad de la demarcación esté representada.
Así, ha defendido que el pacto se ha hecho ahora y no antes del pleno de constitución, y ha explicado que en ese momento el PSC y los comuns pidieron la incorporación de ERC: «Aquí abrimos negociaciones, hasta ese momento todos han negociado con todos».
La "matraca" de junts
Sobre las críticas del diputado de Junts, Ramon Bacardit, reprochando a ERC que han pactado su entrada «por la puerta de atrás», Guiteras ha criticado que Junts use el argumentario de hace cuatro años, lo que a su parecer es una manera de escabullirse de responsabilidades.
«Hemos estado intentando hacer un pacto, como intentamos hacer el 2019. En 2019 los números salían, la aritmética es puñetera», y ha añadido que en ese momento había mayoría pero que se decidió otro pacto (el del PSC con Junts).
«Ha cambiado que la aritmética no daba, y más cuando Junts entró en la Diputación con 12 diputados y antes de constituirse el pleno eran 10. Entiendo que tengan ganas de seguir con esta matraca pero nosotros no lo haremos», ha concluido.