El Ararteko considera fundamental «perseverar en el esfuerzo» para lograr una administración penitenciaria vasca basada en los principios de «dignidad de la persona, reducción del tiempo de prisión, resocialización en el ámbito comunitario, e incorporación de las perspectivas restaurativa, de infancia y de género». Todo ello, no obstante, «desde el respeto absoluto» a las víctimas y a la sociedad en su conjunto.
El Defensor del Pueblo vasco-Ararteko ha planteado esta reflexión en una declaración institucional con motivo del 'Día Internacional Nelson Mandela'.
El Ararteko ha recordado que las 'Reglas Mínimas de Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos' han sido universalmente reconocidas «como referente en la elaboración de normas y políticas penitenciarias» desde su aprobación en 1955.
A partir de la revisión de estas normas en 2015, nació su actual denominación como 'Reglas Nelson Mandela'. A su vez, el 'Día Internacional de Nelson Mandela' de la ONU coincide con el día del nacimiento del dirigente sudafricano el 18 de julio, y pretende poner en valor los principios de libertad, paz y justicia social que encarnó.
Nelson Mandela pasó 27 años en prisión y el Ararteko recuerda este lunes su mensaje fundamental: «las personas presas son activos sociales».
"vulnerabilidad"
El Defensor del Pueblo vasco ha explicado que las personas en prisión siempre han constituido un colectivo «de atención especial» para esta institución, debido a «su particular situación de vulnerabilidad y por las limitaciones que toda privación de libertad impone al disfrute de los derechos fundamentales y resto de los derechos, inevitablemente restringidos por el fallo condenatorio, el sentido de la pena y la ley penitenciaria».
A partir de octubre de 2021, tras la transferencia al Gobierno Vasco de las competencias relativas a la organización, régimen y funcionamiento de los establecimientos penitenciarios, el Ararteko considera fundamental «perseverar en el esfuerzo por lograr una administración penitenciaria vasca anclada en los principios de dignidad de la persona, reducción del tiempo de prisión, resocialización en el ámbito comunitario, incorporación de las perspectivas restaurativa, de infancia y de género, promoviendo la integración de políticas públicas».
Más personal e infraestructuras
Todo ello, de acuerdo a lo establecido en las 'Bases para la implantación modelo penitenciario en Euskadi'. Asimismo, ha indicado que la materialización de una administración penitenciaria integral basada en dichos principios «pasa necesariamente por adoptar las medidas precisas en términos de personal penitenciario e infraestructuras».
De esa forma, ha subrayado la necesidad de abrir el nuevo centro de Zubieta, con el fin de «responder a las necesidades de recursos materiales y humanos de la administración penitenciaria vasca».
El Ararteko valora los pasos dados por la administración penitenciaria vasca «hacia un horizonte de uso excepcional del régimen cerrado», idea que está en la base de la primera recomendación oficial de la institución en la materia (Resolución 2023R-1866-22 del Ararteko, de 27 de febrero de 2023).
En este sentido, ha destacado «la encomiable y necesaria labor» que las entidades del tercer sector del ámbito penitenciario en Euskadi han desarrollado en las tres últimas décadas. Por ello, el Ararteko estima necesario brindar un «apoyo real» de las instituciones y poderes públicos a estas entidades involucradas en la rehabilitación de las personas en prisión, «con vistas a establecer una red efectiva de reinserción de personas presas de Euskadi».
El Ararteko ha animado a todas las instituciones vascas a seguir trabajando coordinadamente para potenciar las penas y medidas en medio abierto; avanzar en la construcción de una red de reinserción vasca; y para orientar el internamiento penitenciario a la reinserción, «desde la defensa y el respeto absoluto a los derechos de las personas en prisión y sus familiares, las personas víctimas y la sociedad en su conjunto».