El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha señalado este viernes la necesidad de «asegurar que el abastecimiento en España del aceite de oliva, que supone aproximadamente unas 580.000 toneladas anuales, se haga a precios razonables», pues en este momento «está muy elevado», todo ello con el objetivo de que «continúe siendo un producto utilizable por la mayoría de los españoles y que mantengamos también los mercados de exportación internacionales».
Así lo ha expresado el ministro en respuesta a preguntas de los periodistas en Córdoba, donde se ha reunido con el secretario general de UPA Córdoba, Miguel Cobos, para tratar los retos y desafíos del sector agrícola y ganadero de la provincia, a la vez que ha recalcado que «todas las consecuencias en materia de producción y de volumen tienen consecuencias en materia de precio».
Esto está siendo «una preocupación que incluso tienen los propios productores», ha puesto de manifiesto Planas, quien ha señalado que, aún así, se «está consiguiendo con menores volúmenes de producción mantener la rentabilidad de muchos productores».
En este contexto, el ministro ha asegurado que ve «con optimismo» la próxima campaña del aceite de oliva en España, pues su «impresión, que es la del conjunto del sector», es que «vamos a estar con una cosecha el año que viene superior a la de este año», aunque «por debajo de la media del 1.400.000 toneladas» de periodos anteriores.
«La puesta en mercado está siendo fluida», ha comentado Planas, quien ha señalado que «el 'stock' de enlace se ha reducido de forma muy significativa», aunque está siendo «suficiente para este enlace entre ambas campañas. Y ahí empiezan las especulaciones de unos y de otros, del productor primario, de la industria o de la distribución», entre otros.
«Los aforos son para final de septiembre», ha recordado el ministro de Agricultura, quien, en cualquier caso, ha afirmado creer que «podemos mirar con optimismo el futuro inmediato».