La vicealcaldesa de Madrid y delegada de Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz, ha afirmado este miércoles que es consciente de la «inquietud» de los vecinos del barrio de Lavapiés por los crecientes problemas de inseguridad y se ha abierto a intensificar el trabajo de la Policía Municipal con la Nacional y la Delegación del Gobierno.
«Hay reuniones permanentes por parte de la Junta Municipal del Distrito también con la Policía Municipal, en nuestro caso del Centro Sur, que es la que corresponde al barrio de Lavapiés. También los servicios de Madrid Salud y Servicios Sociales hicieron reuniones, creo que fueron dos o tres ocasiones, de todos ellos, junto con las asociaciones de vecinos, para seguir evaluando todas las mejoras que se puedan seguir introduciendo en esos sistemas en lo que tiene que ver con las personas con adicciones», ha apuntado.
La edil ha destacado que se ha reforzado la presencia de la Policía Municipal en la zona «no desde ahora, sino desde hace más de un año» y que se han incorporado nuevas cámaras de seguridad y de videovigilancia. «Hay que ponerlas en valor porque la existencia de esas cámaras, en este caso no de las nuevas, sino de algunas preexistentes, han facilitado y han posibilitado precisamente que el reciente crimen de Tirso de Molina se pudiera resolver en muy poquito tiempo», ha ensalzado.
Sanz ha insistido en que la Policía Municipal va a estar en Lavapiés «permanentemente presente». «Pero por supuesto seguimos abiertos a intensificar esa relación de trabajo con la Delegación de Gobierno, con Policía Nacional, de cara a que los vecinos puedan estar también más tranquilos», ha continuado.