La vicepresidenta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, se ha referido al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, como la «quintaesencia del cinismo» en relación con la proposición de Ley que prentede regularizar zonas de regadío en la comarca del Condado de Huelva, al norte de la Corona Forestal de Doñana.
Así lo ha espresado la ministra en declaraciones a los medios antes de intervenir en el acto de inauguración del foro Climate Action Sevilla Summit, en el Palacio de Congresos de la capital andaluza. «A mí me engañó el año pasado, evidentemente ya no me puede engañar porque me mintió el año anterior».
«Creo que esto ha generado una enorme tensión, poniendo en riesgo la viabilidad de un sector muy importante en la provincia onubense, perdiendo credibilidad ante las instituciones europeas, y yo diría que ante el mundo, ya no se puede esconder ni ante la NASA, que muestra las serias amenazas que tiene Doñana», ha añadido la ministra de Transición Ecológica.
La también vicepresidenta del Gobierno ha insistido en la idea de que «para garantizar la viabilidad» de Doñana «tenemos que reducir las presiones» sobre el espacio natural. Asimismo, «para garantizar la viabilidad económica de las personas que viven de los frutos rojos, tenemos que generar alternativas, como estamos generando desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG)». En este sentido, ha destacado la Ley del Trasvase de 2018, «que tanto nos costó y que fue una de nuestras primeras prioridades».
«Es normal que haya tantos españoles, y no españoles, que estén preocupados por lo que yo creo que merece la calificación de una de las catedrales ambientales de Europa», ha añadido Ribera. Por tanto, «en lugar de generar riesgos, amenazas e incertidumbres, lo que corresponde no es esquilmar el parque sino concentrarse para reducir las presiones sobre Doñana y crear alternativas a gente que, lógicamente, aspira a vivir en la zona en la que lo ha hecho siempre y también a tener unas condiciones de vida que les permitan llevar un sueldo a su casa».
En opinión de la ministra, esas alternativas no pasan por sobrexplotar el acuífero, «sino generando otro tipo de oportunidades». De este modo, «sobre esas premisas, como le dije hace un año, y he vuelto a repetir este 2023, estamos en condiciones de trabajar como hemos hecho siempre. Este Gobierno ha respondido siempre ante las grandes dificultades en materia de agua».
«Este Gobierno ha respondido siempre a la consejera Crespo cuando ha pedido ayuda en materia de agua. Lo ha hecho para el saneamiento y la depuración en varias provincias, así como para incrementar la capacidad de desalación o con obras e infraestructuras que hubiera tenido que financiar la Junta», ha afirmado Ribera.
«Estoy esperando que la consejera Crespo nos proponga un plan de inversión real para resolver los problemas, los desafíos de agua en Andalucía, sabiendo, además, que una inmensa parte del territorio andaluz es competencia de esa administración». «Nuestro compromiso es con todos los españoles, gobierne quien gobierne en cada una de las comunidades autónomas , pero basta ya de desfachatez, de hacer dejación de funciones, de reducir los ingresos con la fiscalidad y a continuación venir a clamar que otro me resuelva los problemas que yo no he sido capaz, ni siquiera, de diagnosticar correctamente».
Plan hidráulico contra la sequía
La ministra se ha referido también, a preguntas de los medios, a las declaraciones respecto a la petición de fondos al Gobierno y la UE para la puesta en marcha de un plan para mitigar los efectos de la sequía. «Es muy fácil prometer eso cuando ya se ha hecho. Nos lo ha pedido y le hemos dicho que sí. Andalucía ya tiene 1.200 millones en ejecución, ya cuenta con el Plan Hidrológico del Guadalquivir, ya ha presentado los planes hidrológicos de las cuencas».
«Está diciendo --el Gobierno autonómico-- que Andalucía es la región con más problemas de agua y de sequía de toda Europa, que no sé si será verdad o no, pero desde luego es una comunidad en la que la gestión del agua es particularmente importante y particularmente sensible. Así que está muy bien pedir lo que ya se tiene, es una garantía», ha subrayado Ribera.
«Este Gobierno no se va a olvidar de los andaluces, como no lo ha hecho nunca, y lo que sí esperamos es que en lugar de pedir tanto se arremangue, se ponga a trabajar y se tome en serio el ejercicio de sus responsabilidades en lugar de dedicarse, creo, a hacer declaraciones un poco superficiales, poco meditadas, poco pensadas y poco coherentes con lo que le indica la comunidad científica, la de investigación y los expertos, a los que ignora sistemáticamente».