La Policía Nacional ha detenido al hombre que presuntamente mató ayer a la dueña de una tienda de ropa en la madrileña plaza de Tirso de Molina. También han arrestado a una mujer presuntamente relacionada con estos hechos, ha informado la Policía en redes sociales.
Los agentes del Grupo V del Homicidio creen que la víctima, Concha, una mujer española de 61 años, la dueña de la mercería, se resistió al atraco y por eso recibió varias puñaladas que le costaron la muerte. Según varios testigos, el asaltante salió con la camisa ensangrentada huyendo en dirección a la calle Antón Martín.
Los hechos ocurrieron sobre las 13.30 horas de este lunes en el interior de una tienda de barrio dedicada a la venta de ropa llamada 'Viste Bien' situada en el número 4 de la citada plaza, situada en el centro de la capital.
Un aviso alertó al 091 de la presencia de una mujer con varias heridas de arma blanca en el abdomen en el citado lugar. Cuando los efectivos policiales llegaron al local, la mujer se encontraba en parada cardiorrespiratoria y sangraba abundantemente.
Los agentes iniciaron las maniobras de resucitación cardiopulmonar avanzada hasta la llegada del indicativo sanitario. Una vez en el establecimiento, los sanitarios del Samur-Protección Civil han continuado con los trabajos, aunque finalmente solo pudieron certificar el fallecimiento.
Concha, de nacionalidad española, presentaba varias heridas por arma blanca. En una primer inspección, los efectivos policiales no han localizado el arma empleada en el apuñalamiento, que están buscando por las papeleras y contenedores de la zona.
Agentes del Grupo V de Homicidios de la Policía Nacional se han hecho cargo de la investigación para tratar de determinar las circunstancias en las que se ha producido el apuñalamiento, han indicado a Europa Press fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Se trata del tercer homicidio, los tres de mujeres, registrado ayer lunes en Madrid.
Hasta el lugar ha acudido el marido de la víctima y sus dos hijos, así como otros amigos y compañeros, que se mostraron profundamente consternados por lo ocurrido. También muchos vecinos, que se concentraron espontáneamente para denunciar la inseguridad de la zona, frecuentada por carteristas y toxicómanas todo el día.