La Guardia Civil de Bizkaia y la Policía Local de Barakaldo han detenido en la localidad fabril a tres personas, entre ellas al líder de la banda, como integrantes de un grupo criminal dedicado al tráfico de drogas, según han informado fuentes de la Delegación de Gobierno en el País Vasco.
La operación se desarrolló el pasado jueves por parte de agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Bizkaia y de Policía Local de Barakaldo, quienes, además de los tres detenidos, aprehendieron 150 gramos y 200 dosis de cocaína, una «roca» para elaborar otras 100 dosis más, dinero en efectivo, útiles para la distribución de la droga, joyas y teléfonos móviles.
A los tres detenidos, el líder del grupo y los dos encargados de hacer los «pases» de cocaína, se les atribuyen presuntos delitos de tráfico de drogas, pertenencia a grupo criminal y blanqueo de capitales.
Además, la Guardia Civil y la Policía Local de Barakaldo han intervenido dos ordenadores y una tablet para su estudio, y han solicitado el bloqueo de los bienes muebles y bancarios propiedad del grupo del grupo criminal.
Durante el operativo han sido practicadas entradas y registros en dos domicilios y en una barbería/peluquería, todos ellos situados en la localidad de Barakaldo en Bizkaia, donde operaba el entramado.
Las investigaciones comenzaron en febrero de 2023, cuando se tuvo conocimiento de que varias personas se dedicaban a la venta de droga en la localidad de Barakaldo, y que uno de ellos había cumplido condena por un delito de tráfico de drogas en República Dominicana.
Estas personas, según han explicado desde Delegación de Gobierno, estarían enviando a través de empresas de envío de dinero cantidades considerables a Sudamérica.
Requerida información a la Policía Local, los agentes municipales informaron que habían notado un aumento de denuncias en materia de tenencia y consumo de drogas en la zona.
De las vigilancias y seguimientos practicados se averiguó que el grupo estaría compuesto por un líder y al menos dos personas que se encargaban de la distribución de la sustancia estupefaciente. Tratándose de dos varones y una mujer.
El cabecilla del grupo se encargaba de la vigilancia y control de personas y vehículos que se aproximaban a la zona de venta de droga y los otros dos componentes, además de efectuar los «pases» de la droga, llevaban a cabo la custodia de la sustancia en dos domicilios.
Las distribuciones de la sustancia estupefaciente se practicaban tanto en la vivienda donde residía uno de los detenidos, a pie de calle y a pasajeros y/o conductores de vehículos que, una vez realizados los pases, abandonaban rápidamente el lugar para no ser interceptados.
Los investigadores descubrieron que el entramado criminal había adquirido recientemente una lonja y ejecutado una obra para acondicionarla como barbería/peluquería en la misma localidad y próxima a los domicilios donde se despachaba la droga. Presumiblemente, para ser utilizada como «tapadera» y blanquear el dinero proveniente del narcotráfico.
En concreto, durante los registros se intervinieron 150 gramos y 200 dosis de cocaína, una «roca» de la misma sustancia estupefaciente, que, de ser cortada, daría como resultado unas 100 dosis más, 1.600 euros en efectivo, útiles para la distribución de la droga, báscula de pesaje, recortes de bolsas, alambres, diversas joyas y teléfonos móviles.