La sexta jornada de la huelga semanal de doce horas de los médicos andaluces de Atención Primaria, convocada por el Sindicato Médico Andaluz (SMA) de 8,00 a 20,00 horas, ha estado acompañada este miércoles por una concentración frente al Palacio de San Telmo, sede del Gobierno andaluz, en Sevilla. Así, los facultativos andaluces han manifestado la necesidad de que la Administración «aplique el acuerdo de limitación de agendas en todos los centros de Andalucía» y contemple «la equiparación salarial entre el médico de familias y el médico de Atención Primaria», entre otras reivindicaciones anteriores.
Según ha indicado la vicepresidenta del SMA, Ana Duarte, el pacto para limitar el número de pacientes fijado en las agendas de los facultativos «no se está cumpliendo en muchos centros de salud de Andalucía», tras pasar cinco meses desde su firma. «La demora no puede aguardar más y los compañeros necesitan respuesta», ha afirmado.
En este sentido, Duarte ha apuntado que, actualmente, «muchos de los médicos andaluces tienen triplicado su número de pacientes a atender por cada cinco minutos» y esto ha derivado, a su modo de ver, en una «sobresaturación diaria que no está contemplada». Por tanto, «lo que desde el SMA se ha propuesto es un compromiso para cumplir la norma y lo que las sociedades científicas dicen», que es que «se necesitan diez minutos para atender a cada paciente, y para ello, la única opción es limitar agendas a un máximo de 35 pacientes para médicos de familias y un máximo de 25 para pediatras de Atención Primaria».
Por su parte, el presidente del Sindicato Médico de Sevilla, Rafael Ojeda, ha expuesto que esta sobresaturación de agendas vigente deriva en que «conseguir cita para ir al médico es muy difícil y en muchas ocasiones se consigue para dentro de una semana, diez días o incluso 14». «No es posible que tengamos una media, como dice el Servicio Andaluz de Salud (SAS), de dos días de espera y que el ciudadano que llame se encuentre con grandes problemas para conseguir cita», por lo que «hay una discordancia muy grosera y evidente entre lo que pasa y lo que el SAS nos dice que está pasando».
Por otro lado, Ojeda se ha mostrado pesimista respecto a la sexta mesa técnica sobre el pacto por la Atención Primaria que se desarrolla este miércoles, debido a que «el SAS no ha hecho ningún movimiento claro de acercarse al colectivo médico». Según ha explicado, «el SAS está intentando pactar un acuerdo colectivo con todos los sindicatos, pero en ese acuerdo, salvo por la limitación de agendas que ya estaba pactada, no hay ninguna medida adicional, y, sobre todo, no se contempla la equiparación retributiva entre el médico de hospital y el médico de Atención Primaria», cuestión que desde el sindicato se considera «fundamental».
Al hilo de estas cuestiones, la vicepresidenta del SMA ha recordado que «los complementos denominados continuidades asistenciales que se negociaron con la Administración no están a la orden del día en todos los centros de salud de Andalucía». «Nuestra prioridad es que se cumpla este pacto al que se comprometió la Administración, pese a que »actualmente lo está incumpliendo".
En esta línea, desde el SMA han recordado que «todas las jornadas de huelga conllevan una serie de menoscabo en la nómina de ese mes, por lo que entristece mucho que una Administración que se vanagloria de luchar por la calidad asistencial no cubra un aspecto tan importante como es cuidar a los profesionales».
Asimismo, los médicos andaluces asistentes a la jornada de huelga han recordado que «seguimos sin tener una actualización completa de los Puestos de Difícil Cobertura» y han mostrado su indignación ante la «evidente desigualdad retributiva» que poseen «en comparación con el resto de las comunidades autónomas», una reivindicación que mantienen desde hace meses.
Finalmente, desde el SMA han alertado de que «no hay más margen», ya que la reforma del sistema sanitario andaluz «debe ser inminente». «Seguiremos negociando hasta donde nos permita esta Administración, aunque, si no hay ningún acuerdo, no tendremos problema en seguir con las movilizaciones mientras sea necesario». «Todo nuestro accionar está orientado a defender el derecho de nuestros compañeros, que es nuestro deber», han concluido.