La diputación permanente de Les Corts se reunirá por segunda vez el próximo martes 9 de mayo para acoger la comparecencia del vicepresidente y conseller de Vivienda, Héctor Illueca, sobre la ley estatal que se acaba de aprobar; y para convalidar el decreto ley por el que se aprueba el Bono Cesta de la Compra, circunstancia que ha criticado la oposición al considerarla «electoralista».
Tras pasar por Junta de Síndiques este martes, se ha aprobado que el orden del día conste de estos dos únicos puntos, y no se ha aceptado la petición de comparecencia del conseller de Sanidad, Miguel Mínguez, por la centralización de los CICU.
La oposición le ha llamado «cobarde» por no dar explicaciones sobre esta cuestión tras el fallecimiento de una persona en Elche este fin de semana tras demorarse la ambulancia en llegar, mientras que el Botànic considera que Mínguez ya ha explicado esta organización y que, por tanto, no concurren las circunstancias de excepcionalidad que requiere una diputación permanente.
En primer lugar, el vicepresidente Héctor Illueca comparecerá a petición de Vox para explicar la recién aprobada Ley estatal de Vivienda. Desde la formación, José María Llanos ha defendido que han solicitado esta intervención para que dé cuenta de la situación del parque público de viviendas, y ha incidido en la ocupación de parte de estos inmuebles.
La portavoz adjunta de Unides Podem, Estefanía Blanes, ha defendido que Illueca comparecerá «al contrario que otros presidentes, que se negarán a cumplir la ley cuando entre en vigor». Ha señalado que aquí «se aplicará desde el minuto uno» y ha apostado porque la vivienda «no sea un bien de mercado».
La convalidación del decreto del Bono Cesta de la Compra, que se producirá tres días antes de que comience la campaña electoral, ha levantado críticas por parte de la oposición. Desde el PP, Miguel Barrachina ha reprochado al president, Ximo Puig, que la Junta Electoral haya ordenado dejar de publicitar este bono en redes sociales de la Generalitat.
Así, ha señalado que «tanto los gastos políticos como familiares --en referencia a la investigación a su hermano-- no deben ser pagados por los valencianos, sino en el caso de su familia, por ellos mismos, y en el caso político, por su propio partido y no seguir cargándolos a la Generalitat».
Por parte de Ciudadanos, Fernando Llopis ha aseverado que este decreto supone «propaganda electoral» y ha criticado las ayudas «finalistas»: «El resumen es que el tripartito arruina a las familias y después les da ayudas para generar un modelo clientelar».
Desde Vox, Llanos ha señalado: «El gobierno valenciano se ha esperado a estar a vísperas de las elecciones para presentar un decreto de ayuda a la cesta de la compra y otro a la hipoteca cuando los valencianos llevan años pasándolo muy mal. Solo buscan un rédito político».
A la oposición "se le ve el plumero"
Desde el Botànic han rechazado que este debate sea «electoralista». De hecho, la síndica de Compromís, Papi Robles, ha criticado que a la oposición «se le ve el plumero» con estas críticas porque «lo único que les interesa es volver al poder como en sus mejores sueños». En este sentido, ha defendido que hacer frente a la subida de la cesta de la compra es una necesidad «da igual el mes que sea».
Desde el PSPV, Carmen Martínez ha destacado que esta medida ha sido pionera en todas las comunidades autónomas y se ha mostrado «abochornada» por las declaraciones de Barrachina, que concurrió a las elecciones en las que los 'populares' de Castellón realizaron la campaña «con dinero corrupto». «Se me caía la cara a trozos escuchándole», ha agregado.
Por su parte, Estefanía Blanes (UP) ha subrayado que las familias «no piensan en si estamos en elecciones o no» y ha defendido la ayuda pese a no ser «la mejor ayuda posible». «Si no la quieren, que vayan y se lo digan a los ciudadanos», ha agregado.
El decreto saldrá previsiblemente convalidado con los votos confirmados del Botànic y el PP, mientras que Vox «estudiará» el decreto y Ciudadanos, pese a que no ha explicitado el sentido del voto, ha señalado: «Quién se va a oponer a ayudar a las familias».
Mínguez "cobarde"
La comparecencia del conseller de Sanidad, Miguel Mínguez, no se ha aproboado, lo que ha generado críticas de la oposición. El portavoz adjunto de Ciudadanos Fernando Llopis ha elevado el tono y ha señalado que «el señor conseller es un cobarde». «Es de las personas que más me han defraudado», ha agregado.
Desde el PP, Barrachina ha indicado que «pese a haber cuatro solicitudes de comparecencia del conseller de Sanidad por el CICU se han negado a que comparezca para que explique el desmantelamiento sanitario que afecta a las urgencias por el cierre injusto de los centros de Castellón y Alicante». Así, ha atribuido el fallecimiento de una persona en Elche a la «centralización» y el «desconocimiento del territorio» y ha criticado al Botànic: «Esconden al conseller, no quiere que dé la cara».
Desde Vox han lamentado que Mínguez no acuda ya que «Puig ha decidido que no hay motivos suficientes, cuando la unificación de los CICU ya ha dado los primeros resultados desastrosos». «Hay que recordar que un señor falleció porque se le mandó una ambulancia que estaba a una hora en vez de otra que estaba a 10 minutos», ha agregado el portavoz adjunto.
"quien quiera ruido, que toque la trompeta"
Desde el Botànic, han rechazado la necesidad de que Mínguez comparezca cuando ya dio explicaciones. Para Martínez (PSPV), «es una vergüenza que la derecha utilice una desgracia como la de Elche para hacer oportunismo político carroñero».
Mientras, Papi Robles (Compromís) ha señalado que la oposición «quiere hacer ruido de allí donde no lo hay» ya que Mínguez ha dado explicaciones sobre esta cuestión «en reiteradas ocasiones». «El que quiera ruido, que toque la trompeta», ha zanjado.