El pleno del Parlament ha aprobado este jueves reprobar al conseller de Derechos Sociales de la Generalitat, Carles Campuzano, por haber prometido una nueva residencia en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) en un acto electoral junto al candidato de ERC a la alcaldía del municipio, Gabriel Rufián, como pedían PSC-Units y Junts en dos mociones.
La reprobación de Campuzano ha salido adelante con los votos a favor del PSC-Units, Junts, Vox, comuns, CUP, Cs y PP, y el voto en contra de ERC, el partido del Govern de la Generalitat.
El Parlament ha recriminado la «vinculación de la creación de una segunda residencia pública a los resultados de una formación pública en las elecciones municipales» a través de la moción del PSC y que Campuzano anunciara en un acto de partido actuaciones de la Conselleria, como pedía el texto de Junts.
Asimismo, la Cámara ha reprobado al conseller también por no comparecer en el Parlament «de forma inmediata» en sede parlamentaria, a pesar de la solicitud con carácter de urgencia aprobada por la Cámara catalana, tal y como exponía la moción de Junts.
Otro punto de la moción del PSC, aprobado por todos los grupos parlamentarios excepto Junts, que se ha abstenido, insta al Govern a «llevar a cabo en dos meses las modificaciones de crédito necesarias en el presupuesto de 2023 que posibiliten la redacción del proyecto y la posterior construcción y gestión de una residencia pública en Santa Coloma de Gramenet».
Psc-units, junts y erc
En el turno de defensa de la moción, el socialista Raúl Moreno ha acusado al Govern de no tener como prioridad a las personas mayores, y ha advertido de que al prometer la residencia Campuzano hizo un uso indebido de su cargo: «Es un claro menosprecio a las instituciones de Catalunya, por el que no ha pedido perdón y por el que está obligado a comparecer».
Por su parte, la diputada de Junts Mònica Sales ha asegurado que «nunca un Govern había abusado tanto de sus poderes en clave electoralista» y ha reprochado que la Generalitat no puede hipotecar infraestructuras a los resultados electorales y que la actuación de Campuzano es inaceptable, en sus palabras.
«Con la moción del PSC y la de Junts queda inaugurada la campaña electoral aquí en el Parlament, o cómo arañar cuatro votos e intentar usar este pleno para hacer campaña electoral», ha ironizado Marta Vilalta (ERC), que ha insistido en que el Govern trabaja en la planificación de las plazas públicas en residencias para dar respuesta a las necesidades de las personas mayores en Catalunya.
Vox, cup, comuns, cs y pp
Joan Garriga (Vox) ha sostenido que la moción de Junts evidencia una nueva división entre ERC y sus exsocios de Govern, a quienes ha acusado de añorar pactos con los republicanos, y ha añadido que Campuzano «aprendió el oficio en sus filas y ahora sigue utilizando su cargo para hacer propaganda electoral», en alusión a su época en CiU y el PDeCAT.
La diputada de la CUP Dolors Sabater ha lamentado que las promesas junto a candidatos en campaña electoral no son un hecho aislado, y ha asegurado que PSC y Junts también han recurrido a ese juego electoralista en el pasado, en sus palabras: «Esto es terrible, es caminar por el lado oscuro de la política y condicionar la creación de servicios básicos al color de quien gobierne, o hacerlo creer».
Desde los comuns, Joan Carles Gallego ha defendido que la «acción institucional debe responder a los criterios de eficiencia ética y justicia social» y ha instado a exigir a la acción del Govern un respeto escrupuloso de estos principios, según él, así como reprobar estas prácticas y acciones --textualmente-- las haga quien las haga y vengan de donde vengan.
Marina Bravo (Cs) ha acusado al Govern de «chantajear a los ciudadanos con que esa residencia» y ha llamado a respetar las instituciones en defensa de la libertad y la democracia, y ha añadido que los nacionalistas nunca han distinguido entre sus intereses partidistas y el interés general, en sus palabras.
Finalmente el diputado del PP Daniel Serrano ha reprochado al PSC no haber «priorizado en los Presupuestos la construcción de la residencia y esperar a que el conseller meta la pata para acordarse de la residencia» y ha asegurado que el municipio necesita la necesita al margen del resultado electoral.