La reserva de agua embalsada en la Cuenca del Ebro es de 4.496 hectómetros cúbicos, el 56 por ciento de su capacidad total, a fecha de 10 de abril de 2023, según los datos facilitados este lunes por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).
En la misma fecha, la reserva de 2022 se elevó a 5.382 hectómetros cúbicos, el 68 por ciento de la capacidad. El promedio de los últimos cinco años, de 2018 a 2022, es de 5.865 hectómetros cúbicos, el 74 por ciento de la capacidad total, y el mínimo de los últimos cinco años se produjo en 2022, con 5.382 hectómetros cúbicos, el 68 por ciento de la capacidad total.
En la actualidad, no se supera la reserva promedio de los últimos cinco años y se está por debajo de la cifra de 2022 y del mínimo, que se produjo en el mismo año 2022.
La reserva actual de los embalses de la margen derecha es de 450 hectómetros cúbicos, el 66 por ciento de su capacidad. La reserva en esta fecha en 2022 era de 454 hectómetros cúbicos, lo que representa el 67 por ciento. El promedio de los últimos cinco años ha sido de 438 hectómetros cúbicos, el 65 por ciento, y el mínimo de los últimos cinco años ha sido en 2018, con 302 hectómetros cúbicos, el 45 por ciento.
La energía hidroeléctrica potencial en esta fecha es de 2.143 gigavatios hora (GWh), lo que representa el 47 por ciento de la capacidad máxima de la cuenca del Ebro.