La Ertzaintza, en colaboración con las policías locales, reforzará durante la Semana Santa los controles preventivos de alcohol y drogas a los conductores entre el 4 y el 10 de abril, ambos incluidos.
Según ha recordado el Gobierno Vasco, someterse a dichos controles es obligatorio para todos los conductores que sean requeridos por parte de la autoridad o sus agentes en un control preventivo. En caso de negarse se les podrá imputar un presunto delito contra la seguridad vial.
«Estos días en los que se producen muchos desplazamientos es especialmente importante recordar que debemos conducir en pleno uso de nuestras facultades. Es un hecho que nuestra capacidad de alerta y reacción se ve mermada ante el consumo de alcohol o drogas, lo que puede derivar en accidentes graves», ha asegurado la directora de Tráfico del Gobierno Vasco, Sonia Díaz de Corcuera.