La empresa de componentes del automóvil KDK va a invertir, al menos, 30 millones de euros para construir una nueva planta, junto a la actual que ya posee en el municipio zaragozano de Borja, que permitirá crear hasta 300 puestos de trabajo, los primeros 50 o 60 en junio de 2024, cuando está previsto que esté operativa.
El proyecto ha sido dado a conocer tras una reunión de los responsables de la empresa, entre ellos, el director de KDK Europa, Javier Burunat, con el presidente de Aragón, Javier Lambán, y la consejera de Economía, Planificación y Empleo, Marta Gastón, en la que también ha participado el alcalde de Borja, Eduardo Arilla.
Actualmente, la empresa, de capital coreano, posee 330 trabajadores en Borja y fabrica componentes para 12.000 vehículos al día, de diferentes marcas y modelos. Lambán ha precisado que de los nuevos puestos de trabajo «muchos serán de alta cualificación», y ha anunciado que el proyecto será declarado de interés autonómico en el próximo Consejo de Gobierno.