El Área de Protección al Menor de la Jefatura de Málaga de la Unidad de la Policía Adscrita recibió, el pasado mes de enero, una petición de colaboración del Servicio de Protección de Menores de la Delegación Territorial de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de Málaga, que tenía como objetivo comprobar la situación de una menor de ocho años como consecuencia de un reiterado absentismo escolar por segundo año consecutivo y la imposibilidad de contactar con la familia, quien no atiende a los requerimientos realizados por varios medios.
Los agentes iniciaron la investigación en torno a la unidad familiar, y los agentes comprobaron, a través de su centro escolar, que la menor era absentista por tercer curso consecutivo. Además, a ella se había unido una hermana de seis años que sólo había ido al colegio durante los primeros días del presente curso.
El centro informó que las pequeñas incluso presentaban absentismo en sus etapas de educación infantil, ha indicado la Junta en un comunicado. Tras reunir información escolar, sanitaria y de los Servicios Sociales Comunitarios, y comprobar el hermetismo de los progenitores sobre los motivos de la ausencia de sus hijas, faltando a varias citas con el pediatra o desoyendo las continuas llamadas del Servicio de Protección y de los Servicios Sociales, se estableció por parte del Grupo de Menores un dispositivo policial a fin de localizar a las pequeñas.
Tras este dispositivo, se logró contactar con el padre de las menores, quien acudió al requerimiento policial y de forma voluntaria permitió el acceso de los policías al domicilio.
Una vez en el interior, y pese a estar en horario escolar, se comprobó la presencia de las menores, la cuales dormían en un sofá, encontrándose el resto de la vivienda en un estado caótico, especialmente la habitación de las niñas.
Esto, unido a la información anteriormente recopilada, hizo que los agentes actuaran, informando a los progenitores de los motivos de la decisión tomada por su presunta participación en un delito contra los derechos y deberes familiares.
Las menores fueron llevadas a Dependencias del Servicio de Protección de Menores, haciéndose cargo de las pequeñas una Familia de Acogida Urgente (FAU) gestionada por el ente colaborador Hogar Abierto.
Por todo lo anterior, se llegó a la conclusión de que estas menores habían sufrido el comportamiento de sus progenitores, manteniendo durante años el absentismo escolar muy grave, menoscabando la relación con sus iguales y la formación académica, no colaborando en ningún momento con los Servicios Sociales y con los centros escolares sin ningún motivo y conllevando con ello el aislamiento social de sus hijas.
Los padres fueron citados en dependencias policiales por la presunta participación en un delito contra los derechos y deberes familiares, siendo remitido a la Autoridad Judicial competente y a la Fiscalía de Menores de Málaga el oportuno atestado policial.