Un preso de 57 años ha aparecido este miércoles muerto en el Centro Penitenciario Gipuzkoa (Martutene), en el que es el segundo fallecimiento de un recluso registrado en las últimas 24 horas en las prisiones de Euskadi.
El fallecimiento de este recluso, que se encontraba en prisión preventiva, ha sido dado a conocer por la consejera de Justicia, Nerea Melgosa, durante un acto celebrado en Vitoria-Gasteiz.
El preso fallecido, de 57 años, se encontraba en la enfermería por una dolencia física. El cuerpo no mostraba signos de violencia y, al igual que en el caso del recluso fallecido este pasado martes en la prisión de Zaballa (Álava), se ha incoado un expediente para determinar las causas de la muerte.
Melgosa ha afirmado que no es «nada habitual» que fallezcan dos reclusos en «tan corto» espacio de tiempo en las cárceles vascas. No obstante, ha subrayado que esta posibilidad «está dentro de las variables con las que trabaja el personal penitenciario sanitario».
"todo es mejorable"
La consejera ha explicado que los protocolos para evitar los suicidios «están en continua revisión», y ha reconocido que «todo puede ser mejorable».
En todo caso, ha asegurado que «los profesionales que trabajan en los centros penitenciarios están a un alto nivel de profesionalidad y compromiso», dado que «se enfrentan cada a día a situaciones complicadas por los perfiles de las personas internas a las que tratan».
El Departamento de Justicia ha puesto al servicio de la familia del fallecido la ayuda necesaria para «sobrellevar esta situación tan dura y difícil», según ha explicado Melgosa.