Un equipo de investigación de Ainia está trabajando en potenciales ingredientes y/o compuestos bioactivos para productos cosméticos y productos de higiene personal, capaces de combatir a las bacterias causantes de la caries.
Desde el centro explican que la caries dental es un trastorno que padecen en torno a 2.000 millones de personas en el mundo para el que actualmente, no existen soluciones específicas que actúen frente a los microorganismos que las causan. Ahora, en el marco del proyecto Healthytooth, apoyado por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) y fondos Feder, Ainia investiga en nuevas fórmulas para combatirla.
En concreto, se está estudiando el uso de ingredientes bioactivos (compuestos enzibióticos) obtenidos a partir de virus bacteriófagos con efecto antimicrobiano específico, para desarrollar una estrategia que minimice los efectos de los patógenos causantes de diferentes patologías bucales, entre otros, la bacteria Streptococcus mutans.
La terapia fágica, es decir, el uso de bacteriófagos para combatir infecciones, ya se ha aplicado como alternativa a los antibióticos con resultados satisfactorios. Por ello, en los últimos años, se está ampliando su uso ya que se ha demostrado que, además del uso del bacteriófago completo, se pueden utilizar los compuestos enzibióticos que produce para degradar la pared del microorganismo diana de forma muy específica, subrayan.
Ventajas
Entre las ventajas del uso de fagos están que, al actuar únicamente sobre la bacteria diana, no afecta al resto de la microbiota bucal, y no tienen efectos secundarios sobre el microbioma bucal; tampoco afectan a la microbiota intestinal ya que son compuestos seguros.
Además, la probabilidad de aparición de resistencias a antibióticos es muy baja con este tipo de tratamientos, concluyen los responsables del proyecto.