Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un entramado criminal asentado en el barrio de los Palmerales del municipio alicantino de Elche, que controlaba desde hace al menos dos años la distribución y venta de heroína y cocaína al menudeo. Los agentes han desmantelado los denominados 'fumaderos', que son los principales puntos de venta y consumo de estupefacientes.
Los policías han detenido a los 15 miembros de la trama y se han realizado diez registros en los que se han incautando 220 gramos de cocaína preparados para su venta al menudeo, seis gramos de heroína, 310 gramos de hachís y 39 plantas de marihuana.
Asimismo, se han intervenido dos pistolas y 130 cartuchos de diferentes calibres, dos escopetas y 15 cartuchos, además de armas prohibidas como un bastón estoque y defensa extensible con táser incorporado, así como dos vehículos y 16.575 euros en efectivo.
Esta actuación se ha realizado en el marco de una macrooperación desarrollada por la Comisaría de Elche y apoyada desde el aire por el Servicio de Medios Aéreos y varias unidades especiales de la Policía Nacional, según han informado las fuerzas y cuerpos de seguridad en un comunicado.
Tras cinco meses de investigación, llevada a cabo por el grupo de estupefacientes de la Comisaría de Elche, los agentes han averiguado que los miembros del grupo criminal tenían unos pisos denominados 'fumaderos', donde vendían cocaína y heroína al por menor.
El nombre de estas viviendas se debe a que eran frecuentadas durante todo día por drogodependientes que consumían la droga en el mismo lugar donde la adquirían.
Dos clanes con reparto de funciones
Estos 'fumaderos' eran controlados por miembros de la organización, que estaba compuesta por dos clanes familiares diferentes encargados de gestionar la compra, almacenaje, distribución y venta de cada una de esas drogas por separado.
De esta forma, mientras que un clan controlaba la cocaína que entraba y se vendía en Los Palmerales, el otro clan controlaba la entrada y venta de la heroína. No obstante, ambos compartían la infraestructura criminal, dado que la droga era vendida en los mismos puntos de venta.
Los clanes compraban cantidades de droga suficientes para abastecer los puntos de venta durante una semana aproximadamente y, antes de que se acabase, adquirían nuevas cantidades para poder dar continuidad a su negocio criminal, valiéndose incluso de terceras personas para ocultar sus bienes y propiedades para evitar una posible vinculación con ingresos ilícitos obtenidos.
Los investigadores centraron su atención en la desarticulación del entramado más que en conseguir una importante aprehensión de sustancias estupefacientes. Los agentes descubrieron que no solo controlaba el tráfico de drogas al menudeo en la localidad de Elche, sino también en la Vega Baja.
Unos 1.000 euros de beneficios al día
Entre los dos clanes distribuían sustancias estupefacientes desde ocho puntos de venta de droga. Cada uno de estos puntos generaba unos 1.000 euros al día y podían acudir unas 100 personas.
Dadas las elevadas medidas de seguridad adoptadas por el entramado criminal, el operativo policial se diseñó en dos fases. En una primera fase se intervinieron 200 gramos de heroína y se detuvo a tres personas sobre las que el Juzgado acordó ingreso en prisión sin fianza.
Para esta segunda fase de la operación, se ha desplegado un amplio operativo policial dada la complicación del lugar y el elevado número de objetivos. Además, han participado el Helicóptero del Servicio de Medios Aéreos, del Grupo Operativo de Intervenciones Técnicas (GOIT), Guías Caninos, Unidad de Prevención y Reacción, Grupo Operativo de Respuesta y la práctica totalidad de los efectivos de todos los grupos de policía judicial de la Comisaría de Elche.
Los detenidos, nueve hombres y seis mujeres de edades entre los 22 y 56 años de edad, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Elche, que ha decretado el ingreso en prisión de tres de ellos por ser los cabecillas del entramado criminal.