El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, ha mostrado su satisfacción por haber cumplido con el sueño, y el compromiso de recuperar la Estación Internacional de Canfranc, la Explanada de los Arañones y crear un espacio ferroviario que esté preparado para la futura reapertura de la línea internacional.
Con la apertura este viernes del Hotel Canfranc Estación, 'A Royal Hideway Hotel', en el edificio histórico se cumple «el último hito» previsto en el proyecto del Gobierno de Aragón que comenzó en 2016. Se trata de una iniciativa que nació con el espíritu de preservar el «alma ferroviaria de Canfranc, pero creando la oportunidad de generar desarrollo económico y social en el valle del Aragón», ha apuntado el consejero.
El grupo Barceló organizará un acto inaugural en las próximas semanas, será la puesta de largo de este hotel singular inspirado en la estética de las antiguas estaciones y de los lujosos trenes de largo recorrido de principios del siglo XX, con sus vagones y elementos representativos, pero con un toque contemporáneo.
Respecto al proyecto, Soro ha expresado: «Éramos conscientes de que íbamos a generar un gran caudal de ilusión colectiva y de que asumíamos muchos riesgos pero siete años después lo hemos conseguido, y todos los objetivos que nos planteamos, los hemos cumplido». Ha sostenido que el objetivo era convertir a Canfranc en «un destino referente» y en «un icono del turismo a nivel internacional».
El consejero ha recordado que la inversión del Gobierno de Aragón de 15,7 millones de euros en la rehabilitación de este edificio, «preservando la fidelidad al proyecto diseñado por Ramírez de Dampierre, inaugurado en 1928, pero dotándolo de las innovaciones tecnológicas y la eficiencia energética que se requiere en el siglo XXI». Ha detallado que se ha llevado a cabo un estudio cromático para devolverle su «color original», entre otras actuaciones.
En esta misma línea, el titular autonómico de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda ha señalado que «la propiedad del edificio siempre será pública y el vestíbulo, corazón de Canfranc, una zona de tránsito público que podrán atravesar los viajeros que se dirijan a la nueva estación de tren».
25,4 millones de euros
La explotación de esta infraestructura correrá a cargo del Grupo Barceló que abonará, a través de la sociedad Canfranc Estación 2018, el pago del alquiler por el uso de las instalaciones durante 69 años «de manera que recuperaremos la inversión realizada». Al final del proceso de explotación se habrán ingresado 25,4 millones de euros.
Ha señalado que más allá del pago de un alquiler, la puesta en marcha de este hotel genera un desarrollo económico en la zona muy importante con la creación de empleo directo, suministros, creación de empresas auxiliares, es decir, «es una apuesta decidida para asentar población». «Había que invertir en Canfranc y había que hacerlo pensando en cuál iba a ser el uso posterior de las instalaciones de manera que realmente sean atractivas para generar empleo y actividad económica», ha apostillado.
Ha continuado diciendo que «cumplimos con una promesa hecha a la sociedad aragonesa, la de recuperar un espacio único, singular y que supuso un esfuerzo inmenso de nuestros antecesores, aquellos que creían en que Aragón merecía una conexión directa, a través de Somport, con Francia y que la hicieron realidad».
En el año 2015, el Departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda puso sobre la mesa un nuevo proyecto de recuperación que garantizaba el uso ferroviario, la estación internacional de Canfranc y establecía que se mantuviesen los edificios existentes, sin construir nada ni destruir ningún volumen existente. El proyecto buscaba respetar el entorno, el paisaje, la historia, los elementos ferroviarios existentes y los edificios, y esta ha sido la principal diferencia respecto a otros proyectos anteriores.
Posteriormente, en 2017, el Ayuntamiento de Canfranc aprobó el Plan Parcial que ordena todos los usos de la explanada para garantizar el uso ferroviario pensando en la futura reapertura de la línea internacional y llenar de vida, de nuevo, la explanada de los Arañones. En el diseño se contemplaron zonas de paseo, un anfiteatro, bancos, iluminación, viales y aparcamientos.
La explanada de 198.929 metros cuadrados incluye 67.023 metros cuadrados para uso de Adif y el resto para equipamientos y zonas verdes. Se ha creado un espacio público abierto y transitable donde antes había hasta 12 kilómetros de vías ferroviarias. La propiedad de esta explanada pasará a ser del consistorio de Canfranc. «Se trataba de que fuera una gran plaza abierta a la ciudadanía pero manteniendo el alma ferroviaria», ha afirmado Soro.
En este sentido, el alcalde de la localidad oscense, Fernando Sánchez, ha señalado que es «la oportunidad del nacimiento de un nuevo Canfranc, con posibilidades de desarrollo, con más espacio público y con capacidad para seguir creciendo». Respecto a la apertura del hotel ha recordado que «trasladamos al Grupo Barceló la necesidad de que estas paredes tenían que hablar, contar la historia de Canfranc». «Estamos muy ilusionados y contentos de ver cómo han trabajado y convencidos de que este nuevo hotel será un éxito», ha añadido.
Historia de las actuaciones
Los trabajos comenzaron con la intervención en uno de los edificios y el traslado de la antigua playa de vías. El primer edificio que se recuperó fue el de las antiguas cocheras francesas convertido en la actualidad en un edificio funcional que albergará el 'Centro de acogida e información transfronteriza del camino francés'.
La nueva playa de vías se ubicó en la zona de la explanada más cercana a la ladera este. En esa zona, aprovechando los hangares de transbordo, se construyó la nueva estación de viajeros que se inauguró en abril de 2021. Para llevar a cabo esta obra se invirtieron 9,8 millones de euros. La nueva infraestructura se ha realizado teniendo en cuenta una serie de criterios de convergencia para que sea interoperable pensando en la futura reapertura de la línea internacional.
En agosto de 2020 comenzaron las obras de recuperación de la Explanada de los Arañones, unos trabajos que empezaron a partir de abril de 2021, una vez liberado el tráfico en la zona oeste. La inversión ha sido de 7,8 millones de euros y se ha creado un espacio cargado de simbolismo y abierto al disfrute de la ciudadanía.