Agentes de la Policía Nacional han detenido el pasado día 24 de enero en la localidad malagueña de Vélez-Málaga a la cuidadora de una mujer de 78 años, que estaba postrada en la cama, por su presunta implicación en los delitos de trato degradante y lesiones, ya que supuestamente no procuraba los cuidados que necesitaba la anciana y, además, la zarandeaba, le vociferaba al oído y le ponía trapos sobre el rostro, taponándole las vías respiratorias.
Los hechos han sido grabados por una cámara de video instalada en el domicilio de la mujer a la que tuvo acceso un vecino, que fue quien denunció la situación; el cual había pasado años cuidándola hasta que recientemente la investigada se lo prohibió, según han informado desde la Comisaría provincial a través de un comunicado.
La investigación, realizada por agentes adscritos a la Unidad de Familia y Atención a la Mujer (UFAM) de la Comisaría de Vélez-Málaga, se inició con la denuncia de un ciudadano residente en la localidad, quien informó de los tratos vejatorios que sufría una vecina por parte de una supuesta cuidadora.
El denunciante expuso a los agentes como él mismo había cuidado durante años, de manera compartida con otras personas, incluida la denunciada, de una septuagenaria alemana, que vivía sola en su domicilio, tras enviudar, y que no tenía descendencia.
Con el objetivo de que las personas que habitualmente se encargaban de la anciana pudieran conocer en todo momento --desde sus teléfonos móviles-- si la mujer necesitaba ayuda, dada su delicada situación de salud, se instaló una cámara en la vivienda. Lo que venía siendo un gesto de ayuda colectiva hacia la mujer cambió en los últimos tiempos, al monopolizar la sospechosa los cuidados e impedir a terceros que se acercaran a la anciana.
La actitud extraña de esta cuidadora levantó las sospechas del entorno de la víctima, presagiando sus conocidos que algo no iba bien. Según las averiguaciones, la víctima cambió su testamento recientemente en beneficio de la investigada, en una acción que el denunciante sospecha que pudo realizarse sin que la mujer fuese consciente de ello.
Precisamente, la cámara instalada en la vivienda de la septuagenaria, de la cual tendría conocimiento la investigada, terminó recogiendo la situación de maltrato. Según las pesquisas, durante el tiempo que pasaba supuestamente cuidando a la mujer, la detenida le «escupía, la zarandeaba y le gritaba al oído, entre otros tratos denigrantes».
Finalmente, la anciana ha sido rescatada de su domicilio en un estado de salud muy delicado, con hematomas y graves deficiencias respiratorias. En estos momentos, permanece ingresada en un hospital, han indicado desde la Comisaría.