El autor confeso de la muerte violenta de una mujer de 44 años en Roquetas de Mar (Almería) este domingo fue denunciando en octubre de 2022 por supuestamente agredir sexualmente a un otra mujer, si bien no pudo acreditarse la presunta comisión del delito por la negativa de la víctima a testificar.
Fuentes de la investigación han indicado a Europa Press que el joven, de 30 años, alegó al ser arrestado en el domicilio de la fallecida que había consumido cocaína, alcohol y cannabis «antes y después de mantener relaciones sexuales» supuestamente «consentidas» con ella.
El presunto homicida, para quien el juez decretó el martes prisión provisional, comunicada y sin fianza, habría «discutido» con la víctima y, en un momento de la pelea, la habría «agarrado» por el «cuello, apretando con fuerza».
De la investigación inicial del crimen, que se produjo en la madrugada del 6 se enero, se desprende que hubo «un forcejeo» durante el que el imputado habría rodeado con su brazo el cuello de la mujer hasta producirle la muerte por «estrangulamiento».
El joven, de origen senegalés y al que se atribuye un presunto delito de homicidio doloso, y la víctima, de nacionalidad rumana, no eran pareja sentimental, «aunque sí mantenían relaciones sexuales consentidas de forma esporádica», según informó el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA)
Las diligencias de la Guardia Civil no han revelado «indicios» de que «existiese relación afectiva» entre la mujer y el autor de la muerte y «tampoco» ha arrojado «datos» que señalen que el detenido estuviese incluido en el sistema VioGén de seguimiento a mujeres víctima de violencia de género.
Fue el servicio 112 el que recibió la alerta mediante una llamada del hijo de la fallecida, con quien compartía vivienda en la calle Las Palmeras del barrio de las 200 viviendas de Roquetas de Mar y quien informó de que había oído «gritos».
A lugar se desplazaron 061 y agentes de la Guardia Civil ante los que admitió haber estrangulado a la mujer «tras haber mantenido relaciones sexuales» con ella.