Delegadas y delegados de CCOO y UGT se han encerrado desde este martes por la mañana en la cúpula XXX del Edificio Pignatelli de Zaragoza, sede del Gobierno de Aragón, para protestar contra la privatización del servicio público de Tutela de Adultos del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) y el despido de un «buen número» de trabajadores y trabajadoras que prestan servicio en él.
Los sindicalistas han comunicado que quieren mantener el encierro para impedir que este miércoles se pueda celebrar la Mesa Sectorial donde se llevarían a cabo la amortización de las plazas, ha informado UGT y CCOO en una nota de prensa.
Han detallado que este 11 de enero las organizaciones sindicales han sido convocadas a una Mesa Sectorial de Administración General donde uno de los puntos del orden del día es la amortización de 27 puestos de trabajo del Servicio de tutela de Adultos pertenecientes al IASS.
Este servicio es el encargado de tutelar, por orden de un juez, a las personas adultas incapacitadas para hacerlo por sí mismas cuando no existe un familiar cercano que pueda hacerse cargo. Solo en el año 2018 atendió a más de 1.300 personas en todo Aragón.
Para CCOO y UGT, se trata de una nueva privatización, ya que este «desmantelamiento» coincide con la creación de la Fundación para el Apoyo a la Autonomía y Capacidades de las Personas de Aragón, que asumirá las tareas y que para ambos sindicatos únicamente supondrá «la pérdida de calidad y atención de personas que viven en la pobreza, solas, y que dependen de la administración para poder tomar decisiones».
Además, han dicho que esta privatización supone el despido de 14 trabajadoras y trabajadores y tendrá su materialización en la Mesa Sectorial convocada para este miércoles.
CCOO y UGT quieren que esta reunión no se celebre, por lo que han decidido encerrarse desde en el lugar donde está prevista y han pedido a la Administración «que reflexione, mantenga el servicio público y no despida a sus trabajadores y trabajadoras».