El secretario general de UGT de Catalunya, Camil Ros (UGT), ha pedido a la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y al resto de patronales que en 2023 alcancen con los sindicatos el acuerdo de incremento salarial «que no se ha alcanzado» en 2022.
Lo ha dicho este miércoles en rueda de prensa, en la que ha subrayado «la importancia de que el conjunto de trabajadores tenga un incremento salarial mínimo y luego sector a sector se pueda gestionar las cláusulas de revisión salarial».
Ha afirmado que las empresas pueden asumir el coste del incremento salarial y ha asegurado que si empresas y patronales no lo han elevado de acuerdo con la subida del IPC «no es porque no puedan sino porque no quieren».
Ha sostenido que este 2023 desde los sindicatos seguirán reclamando la subida de los salarios y ha lanzado un mensaje a las patronales: «Ellas elegirán si quieren acuerdo o conflicto. Lo mejor sería volver a las mesas de negociación».
Presupuestos
Acerca de los Presupuestos de la Generalitat para 2023, Ros ha señalado que no se puede alargar más su aprobación ya que, a su parecer, van tarde: «No se puede demorar más esta situación».
Ha reivindicado textualmente que los sindicatos ya hicieron su parte en la negociación, y ha recalcado que las Cuentas catalanes nunca antes se habían pactado con los sindicatos «porque la Generalitat no había querido negociar partidas de presupuestos».
Ha celebrado que con los cambios en el Govern tras la marcha de Junts, ha habido «más diálogo social y se han podido alcanzar algunos acuerdos importantes», como en el ámbito de la Formación Profesional (FP), ha destacado.
Ha instado a los grupos parlamentarios que están en la negociación a hacer más reuniones y menos declaraciones, y a que «cambien la calculadora: que aparten la calculadora electoral táctica y cojan la calculadora de los presupuestos y los acuerdos sociales».
RECLAMA «CONTROL DE PRECIOS»
Ros ha reclamado al Gobierno que establezca un «control de precios» para evitar que se siga especulando con la energía, los alimentos o las materias primas.
Ha considerado que la mayor parte de las ayudas del Gobierno van en la buena dirección, pero cree que «el camino no es bajar impuestos e IVA sino controlar precios, porque, sino, se seguirá especulando con energía, carburantes y alimentación».
«A veces bajar impuestos y bajar el IVA es pan para hoy y hambre para mañana», ha avisado.
No ve "ningún indicador" de recesión
El líder sindical ha asegurado que «de momento no hay ningún indicador que haga ver» que haya recesión económica en España, y ha dicho que la economía está en un momento de recuperación tras los efectos de la pandemia.
Ante este diagnóstico, ha llamado a los políticos a hacer «menos discursos y más políticas de reactivación económica y más ayudas para los que lo están pasando mal».
En esta línea, ha celebrado que el 2022 ha sido un año de recuperación de derechos, gracias a la entada en vigor de la reforma laboral del Gobierno.
Por contra, ha lamentado la «perdida de poder adquisitivo por parte de los trabajadores» a causa de la inflación en Europa provocada por los efectos de la guerra en Ucrania.
Destaca los "buenos resultados" de la reforma laboral
Ha asegurado que la reforma laboral «ha tenido buenos resultados», y cree que el aspecto más destacable es la contratación indefinida, que ha representado un 41% del total de contratos en España en 2022, algo que no existe en los históricos del mercado de trabajo español, en sus palabras.
Ha considerado que estos datos son muy buenos pero recalca que hay que vigilar «que no se esté haciendo un mal uso» del contrato fijo discontinuo, que ha representado un 10% de la contratación española en 2022 y ha subido en un 622% respecto 2019.
Y ha aseverado que el PP ha demostrado «un profundo desconocimiento e hipocresía» al intentar tapar los buenos efectos que ha dejado la reforma.