El conseller de Empresa y Trabajo de la Generalitat, Roger Torrent, ha destacado este martes la «resiliencia» del mercado laboral catalán en un 2022 marcado por la subida de los precios --sobre todo, de la energía-- y los efectos de la guerra en Ucrania sobre la economía.
Lo ha dicho en rueda de prensa este martes tras la reunión del Consell Executiu junto a la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, tras hacerse públicos los datos del paro de diciembre, mes en el que la desocupación en Catalunya ha bajado en 2.644 personas hasta situarse en los 346.338 desempleados.
«Esta fortaleza del mundo laboral es un punto de partida positivo para encarar un 2023 en que estas nuevas dificultades y, por tanto, las incertidumbres se mantendrán», ha advertido el conseller, que ha destacado que las cifras de paro de diciembre son las mejores desde 2007 en Catalunya.
Torrent ha afirmado que 2022 debía ser «el año de la consolidación de la recuperación» tras la pandemia, hasta que la guerra en Ucrania agravó la crisis de suministros con un incremento de los precios que impacta en las familias y en las empresas, ha dicho.
Pese al escenario de incertidumbre --ha subrayado-- la Generalitat encara 2023 con un «optimismo moderado», en un contexto económico al que la Unión Europea está dando una respuesta distinta a la de la crisis de 2008, y que Catalunya afronta con una economía mucho más diversificada que entonces.