Los Mossos d'Esquadra han desarticulado un grupo criminal que traficaba con marihuana y hachís con epicentro en las comarcas de Lleida, ha informado el cuerpo en un comunicado este miércoles.
La organización estaba formada por unas 15 personas, y hasta el momento se han detenido a 7 personas de entre 31 y 49 años, de los cuales cinco han ingresado a prisión, y los Mossos no descartan más detenciones.
Los miembros seguían estrictas medidas de seguridad y autoprotección, y gestionaban tres naves industriales en las poblaciones leridanas de Bellvís, Benavent de Segrià y Sidamon, y también hacían parte de la actividad desde dos domicilios de Lleida.
El grupo tenía capacidad de generar entre cuatro y cinco floraciones al año, en unas infraestructuras diseñadas con la finalidad de obtener «la máxima eficacia y rendimiento de cada plantación para generar mayores beneficios».
Estaba conformado por un líder que gestionaba las naves y coordinaba el grupo, un encargado que proporcionaba material y comida a las personas que cuidaban permanentemente las plantaciones; el equipo de jardineros y cuidadores, conformado por diez personas y por último dos personas más que gestionaban los contratos de alquiler de las naves y la constitución de empresas tapadoras.
El 13 de diciembre se llevó a cabo el operativo policial con seis entradas y registros, en el que los agentes detuvieron a siete personas y encontraron material habitual en plantaciones interiores como ventiladores, lámparas, transformadores o extractores, además de siete kilos de marihuana preparada para ser distribuida y documentación que acredita el alquiler de las naves y la adquisición de material o productos destinados al tráfico.
Los detenidos están siendo investigados por presuntos delitos contra la salud pública, defraudación del fluido eléctrico, blanqueo de capitales y pertenencia a un grupo criminal.