El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha reconocido la existencia de «problemas» en Osakidetza, aunque en respuesta a las críticas de la oposición, ha asegurado que el Servicio Vasco de Salud no sufre una «grave crisis», y ha realizado una valoración «positiva» de la gestión de la consejera de Salud, Gotzone Sagardui.
Urkullu, así como la propia Sagardui, están respondiendo este viernes, en el pleno de control del Parlamento Vasco, a varias preguntas de la oposición sobre la situación en la Organización Sanitaria Integrada (OSI) Donostialdea, en la que el malestar de una parte de la plantilla con la dirección se ha traducido en las últimas semanas en varios ceses, dimisiones y protestas laborales.
El lehendakari ha reconocido que en el Servicio Vasco de Salud hay «problemas», buena parte de los cuales está relacionado con el «tensionamiento» derivado de la pandemia de covid-19, sobre la que ha recordado que «sigue declarada».
No obstante, en respuesta a las críticas de la oposición, ha negado que Osakidetza atraviese una «crisis grave», y ha realizado una valoración «positiva» de la gestión de Sagardui.