La Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FVEM) ha anunciado que continuará asistiendo a la mesa negociadora del convenio del Metal de Bizkaia, pero ha advertido de que las empresas «ya están en el límite de lo que pueden ofrecer».
«Es hora de que los sindicatos hagan un ejercicio de responsabilidad y revisen sus peticiones con una perspectiva más realista de la situación económica actual y coherente con los convenios que se están firmando en nuestro entorno», ha afirmado.
En un comunicado, la patronal del Metal de Bizkaia ha señalado que ha finalizado «sin avances» la mesa de negociación del Convenio del Metal de Bizkaia, que ha vuelto a reunirse hoy, por primera vez tras los cinco días de huelga que convocaron los sindicatos, y que fue secundada «solamente por alrededor del 18% de las personas trabajadoras».
En su opinión, la reunión ha fracasado porque los sindicatos «continúan sin hacer modificaciones relevantes que posibiliten llegar a acuerdos».
Por la parte empresarial, ha recordado que previo a dichas huelgas se propuso una oferta que «mejora las condiciones que se han firmado en otros convenios vascos como el del Metal de Álava, un acuerdo que los mismos sindicatos han calificado de 'histórico' en dicho territorio y que ha sido su referencia, al que han aludido en todo momento en sus publicaciones, y que ahora les parece muy insuficiente» en Bizkaia.
Entre otros, ha destacado que se ha «garantizado el poder adquisitivo de las personas de las personas de acuerdo con el IPC anual, se mantiene la garantía mínima, se ofrece un día de libre disposición recuperable, se aumenta la subrogación y se mantienen otros aspectos como la flexibilidad». «Sin embargo, las condiciones que han firmado en el territorio vecino son rechazadas por los mismos sindicatos que allí las aceptan, una incoherencia y una falta de responsabilidad ante todas las personas que trabajan en el sector», ha agregado.
A partir de ahora, según ha indicado, las empresas del Metal de Bizkaia, representadas por FVEM, pasan a una situación «de escucha».
«Habiendo hecho todo lo posible por alcanzar el esperado acuerdo, tras múltiples mejoras en las ofertas presentadas, FVEM ha dejado patente su voluntad negociadora. Sin embargo, no pueden alcanzarse acuerdos cuando solo una de las partes negocia, mientras que la otra trata de imponer continuamente sus exigencias», ha concluido.