El sindicato CSIF se ha concentrado este miércoles ante la Conselleria de Sanidad, en València, para reclamar mejores medios y condiciones de trabajo, más recursos humanos y plantilla estructural, y ha avisado de que se sumará a la huelga de médicos convocada por CESM los días 17 y 18 de enero de 2023 si durante este próximo mes de diciembre no ve «mejoras y logros concretos» en la sanidad pública valenciana.
El presidente provincial de CSIF en Valencia, Fernando García, en declaraciones a los medios, ha exigido a Sanidad que negocie con ellos, así como «soluciones» ante la situación sanitaria actual porque ha reivindicado que la sanidad pública «que todos queremos y deseamos tiene que ser real». «Queremos soluciones a esta sanidad que está empeorando a pasos agigantados», ha avisado.
Las demandas de la organización sindical pasan por la necesidad de más recursos humanos, más plantilla de carácter estructural, mejores condiciones a los profesionales y, «sobre todo, que el personal que está en formación no se vaya». «Queremos que el usuario no esté un mes esperando una cita de médico de atención primaria, porque entonces lo que sucede es que se el paciente se va a Urgencias, las colapsa y así vamos», ha señalado.
García ha reivindicado que desde el sindicato quieren «la mejor sanidad y por eso estamos aquí, para exigir que --la Conselleria de Sanidad-- se ponga manos a la obra». Para ello, entregará al conseller de Sanidad, Miguel Mínguez, un manifiesto con las peticiones de los profesionales de forma «contundente y enérgica», entre ellas más platilla estructural para poder atender a los pacientes «con un tiempo y trato digno». «Pedimos que no sólo se escuche, sino que se solucione», ha apuntado.
El sindicato ha expuesto la «grave situación» que sufre la sanidad pública valenciana, con urgencias «colapsadas y decenas de pacientes esperando cada día a ser ingresados en los hospitales» debido que las plantas «están llenas».
"colapso"
A esta situación, ha añadido, se suma «el colapso en la atención primaria, con médicos de familia atendiendo a entre 60 y 80 pacientes diarios y pediatras que alcanzan los 40». Frente a esta situación, CSIF ha subrayado que una calidad asistencial adecuada «pasa por incrementar plantillas y rebajar a la mitad esas ratios».
La central sindical ha recalcado que la situación resulta «insostenible» y ha asegurado que llega «hasta el extremo de vehículos del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) que realizan turnos sin médico o a la falta de sustitución al personal en vacaciones, como las próximas de Navidad, que derivan en cierre de consultorios auxiliares y en un recorte drástico de la atención al usuario».
Precisamente, ante la proximidad de las fiestas, ha alertado de la «sobrecarga asistencial» a causa, en gran medida, de las enfermedades respiratorias. «Ya se está viendo con los niños», ha apuntado, al tiempo que ha augurado que la situación «va a ir a más». «Se está viviendo una situación de saturación y pedimos más recursos y que se planifique», ha recalcado, al tiempo que ha acusado a la Conselleria de Sanidad de «mirar a otro lado» con este asunto.
El sindicato ha advertido igualmente de la suspensión de operaciones por «falta de camas» en planta y para evitar «un mayor colapso del servicio de Urgencias», y ha alertado de que la dimensión del problema «aumentará debido a las jubilaciones y falta de relevos, además de por la marcha continua de profesionales a otros lugares donde les ofrecen mejores condiciones».
CSIF ha reclamado baremos «justos y no discriminatorios», seguridad jurídica en los procesos selectivos y una valoración «real» de la experiencia laboral y de la actividad formativa. Todo ello ha considerado que debe ir «unido a una mejora de las condiciones laborales, con la extensión, por ejemplo, del complemento de servicios especiales que supone un reconocimiento a la penosidad de la labor o al riesgo de contagio».
La central sindical, además, ha denunciado la «constante falta de negociación» por parte de la Conselleria y ha apuntado que un «ejemplo palpable» lo constituye el Foro de Negociación del Personal Residente, que «no se reúne desde hace casi dos años a pesar de la urgencia de abordar una mejora de los alrededor de 4.000 profesionales que componen este colectivo en la Comunitat Valenciana».
El sindicato, en la protesta de este miércoles, ha reclamado una negociación «real y sin imposiciones» y ha exigido a Sanidad que «se deje de parches y escuche las aportaciones sindicales». En esta línea, ha recalcado que la Conselleria, con «su falta de soluciones y carencia de diálogo», está llevando a una «situación límite» al sistema sanitario público valenciano.
"falta de consideración"
Por su parte, la delegada de CSIF Amparo Molla ha lamentado que el colectivo sanitario lleva «mucho tiempo soportando un problema», que es el de «la falta de consideración y de atención por parte de la Conselleria». «Seguimos sin tener un plan para atención primaria, los recursos estructurales que estamos pidiendo desde hace mucho tiempo han llegado pero bajo mínimos, y estamos cansados, queremos calidad asistencial», ha subrayado.
«Como médicos y como profesionales, necesitamos que la Conselleria nos ponga en el nivel y en el sitio donde debemos estar y, por lo tanto, queremos que se nos escuche y que se llegue a un acuerdo. Estamos muy cansados», ha manifestado, y ha censurado que Sanidad «desde hace mucho tiempo está haciendo caso omiso y solo está sacando reglamentos, leyes y decretos sin ningún tipo de seguridad jurídica».