La delegada de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid, Paloma García Romero, ha garantizado este viernes que las uvas de Nochevieja se podrán tomar en la Puerta del Sol con total normalidad. «No habrá ningún problema», ha asegurado.
En declaraciones a 'Telemadrid' recogidas por Europa Press, la titular de Obras ha recordado que la emblemática plaza madrileña quedará abierta a los peatones para el puente de la Constitución, aunque las obras que se están llevando a cabo en este icónico enclave no finalizarán hasta la próxima primavera.
En este sentido, ha explicado que el Gobierno municipal ha decidido paralizar las obras y abrir la Puerta del Sol «para que se puede pasear» y de cara a las fechas navideñas «va a estar la pavimentación terminada en un 90%».
El 10% restante, ha indicado, «va a quedar por Montera para que no genere ningún tipo de problema». Tras el parón navideño, el día 7 de enero se retomarán de nuevo las obras «y quedará muy poco para finalizarlas en esa época», con el horizonte puesto en la próxima primavera.
De este modo, Paloma García ha subrayado que no habrá «ningún problema» para que los madrileños puedan despedir el año desde este icónico enclave y «puedan disfrutar con toda normalidad de esa plaza».
Encendido navideño: una hora, 180 euros diarios
En cuanto al encendido navideño que este jueves dio el pistoletazo de salida a la Navidad en la capital, la delegada de Obras ha defendido la decisión de mantener el mismo horario que en otros años, desde las 18 a las 00 horas de lunes a viernes y una hora más, hasta la una de la madrugada, los fines de semana.
«Si quitábamos una hora únicamente suponía un ahorro de 180 euros diarios, muy pequeño para la contraprestación y el retorno que tiene Madrid para el comercio, hoteles, restauración y la ciudad en general», ha defendido la titular de Obras.
En este sentido, ha recordado que se cuenta con 11 millones de bombillas de led de alta eficiencia energética, con un consumo «muy pequeño», y ha destacado la acogida que el alumbrado ha tenido entre los madrileños, que en su inauguración «tomaron» la Gran Vía y la Plaza de España para disfrutar de este espectáculo.