El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha cargado este viernes contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por «humillar a los españoles» con la derogación del delito de sedición, mediante el cual considera que lo trata como un «botellón» y con el que coloca «alfombra roja» al expresidente catalán Carles Puigdemont para su regreso.
«Tratar esto como si hubiera sido un botellón o una juerga callejera cuando se trata de subvertir el orden constitucional es insultar la inteligencia de los españoles. Esto no es una ley de desórdenes públicos, esto es la ley Puigdemont, porque el que prometió traerlo aquí a la cárcel, acaba de ponerle una alfombra roja para que vuelva humillando la dignidad de los españoles. No le va a salir gratis», ha manifestado ante los periodistas desde Madrid Río.
Así ha valorado el regidor la propuesta del Gobierno para derogar el actual delito de sedición y sustituirlo por otro desórdenes públicos agravados que contempla penas para las autoridades de 3 a 5 años de prisión --frente a los 10 a 15 años que recoge el Código Penal vigente-- e inhabilitación de 6 a 8 años --frente a los 10 a 15 años que establece la ley actual--.
Para el regidor madrileño, con esta acción Pedro Sánchez «consuma una humillación al conjunto de los españoles» y considera «intolerable en un presidente del Gobierno haya vendido la dignidad de la Nación por intereses políticos». «Ayer quedó descalificado, por si había alguna duda, para ejercer con dignidad la Presidencia del Gobierno de la Nación», ha abundado.
Además, considera que «las excusas» para modificar el Código Penal «no son más que un conjunto y una sarta de mentiras», ya que «lo justifican diciendo que esto son desórdenes públicos, no, esto no fue un botellón que acabó en enfrentamiento con la Policía. Esto no fue una juerga que acabaron enfadados entre ellos».
Sí fue, sostiene Almeida, «una operación diseñada para subvertir el orden constitucional». «Eso es lo que pasó allí en Cataluña, y lo que hicieron los socios de Pedro Sánchez, es pretender declarar la República Catalana, como hicieron aunque fue por el periodo ridículo de 8 segundos», ha remarcado a continuación.
Posible moción de urgencia
Requerido por la posibilidad de realizar una moción de urgencia contra Sánchez, el alcalde madrileño sostiene que «se tendrá que pronunciar en su caso la Dirección Nacional», si bien es consciente de que «la aritmética parlamentaria no sale, y no prosperaría esa moción de censura».
Sin embargo, entiende que «a lo mejor es Pedro Sánchez quien tiene que convocar elecciones y preguntar a españoles si están dispuestos a que se les humille».
La apuesta del PP para «devolver la convivencia en Cataluña no pasa por superponer interés particular al interés de los españoles», ha continuado, ni tampoco «premiando a los que hicieron un golpe de Estado». «Pasa por respetar la Democracia y por respetar el Estado de Derecho y no premiar a los que pegaron un golpe por aprobar unos presupuestos», ha finalizado.