Agentes de la Policía Nacional han detenido en València a dos menores, de 14 y 15 años por presuntamente agredir a otros tres jóvenes, a los que pegaron puñetazos y patadas, les cogieron por el cuello y les lanzaron piedras, y sustraerle el teléfono móvil a uno de ellos.
Los hechos ocurrieron sobre las 2.30 horas de este sábado en el cruce de la calle Sagunto con la calle Ruaya, donde varios agentes vestidos de paisano que participaban en un dispositivo especial para la prevención de robos con violencia e intimidación observaron como un joven reclamaba la presencia de una patrulla uniformada.
Tras interesarse por el hecho, los agentes averiguaron que el joven acababa de ser víctima de un robo con violencia, según han informado las fuerzas y cuerpos de seguridad en un comunicado.
Al parecer, momentos antes el joven se encontraba en un descampado junto a dos amigos cuando «de repente» se vieron rodeados por un grupo de siete jóvenes que les exigieron «de forma intimidatoria» que les dieran «todo lo que llevaban».
Ante la negativa de los tres chicos, comenzaron a agredirlos, lanzándoles puñetazos y patadas y cogiéndolos del cuello para arrebatarles sus pertenencias. Finalmente, cuando lograron sustraerles un teléfono móvil, los soltaron y los jóvenes escaparon a la carrera mientras les arrojaban piedras.
Tras recabar datos de los agresores, los agentes pusieron en marcha un dispositivo de búsqueda por los alrededores de la zona donde habían ocurrido estos hechos.
Así, en el transcurso del mismo, observaron a un grupo de jóvenes que se dirigían en actitud nerviosa y a la carrera por el cauce del Turia y que coincidían «plenamente» con las características de los presuntos agresores.
Al percatarse de la presencia policial, los sospechosos huyeron y se dispersaron a la altura del puente de Trinidad. Dos de ellos fueron interceptado en la calle Libertad y, al ser interpelados por su actitud huidiza, manifestaron a los agentes que habían sido ellos los que en compañía de cinco amigos habían agredido a tres personas.
Los agentes detuvieron a los menores como presuntos autores de un delito de robo con violencia. Tras ser oídos en declaración y ser informada Fiscalía de Menores, los jóvenes han quedado en libertad y han sido entregados a sus tutores legales.
Por su parte, las víctimas fueron trasladadas a un centro hospitalario para ser asistidas.