Ignacio Dancausa se alzará con la Presidencia de Nuevas Generaciones de Madrid en el XIII Congreso Autonómico con el objetivo de «renovar y rejuvenecer» la organización juvenil y «dar la batalla a la izquierda, que quiere politizarlo absolutamente todo».
Con 20 años y militante del PP desde 2018, este estudiante de doble Grado de Gestión y Administración Pública y Economía en la Universidad Complutense de Madrid y líder de Libertad Sin Ira, asociación estudiantil que hace frente al «mal clima de convivencia» generado por izquierda, sustituirá a Ana Isabel Pérez Baos, en el cargo desde 2013.
En una entrevista con Europa Press, Dancausa ha explicado que quiere trasladar a Nuevas Generaciones lo que hace en la Universidad «pero a gran escala», de la mano de la presidenta de la Comunidad y del partido, Isabel Díaz Ayuso, pero con, como ella misma le ha trasladado, «libertad y autonomía».
«Quiero que lancemos un mensaje que no vaya enfocado únicamente a la gente que es del PP o que es de derecha o centro-derecha. Creo que somos una organización muy grande, que tenemos a mucha gente, y tenemos la oportunidad de abarcar todos los espacios de la sociedad civil», ha detallado. Así, quiere poner en marcha actividades que «no solo sean atractivas» para los del partido, nutrir la organización de opiniones más allá del su espectro y «estar con toda la sociedad civil».
Tiene claros cuáles son los problemas de los jóvenes, coincide con el diagnóstico de Ayuso, y reivindica que hay que poner el foco en combatir las adicciones, «que cambian la sociedad y que destruyen familias», y apostar por la salud mental. «Es algo que no es solo de derechas, es un tema trasversal, social y de sentido común. Se puede hacer mucha pedagogía», ha subrayado.
"igualdad de oportunidades, no igualdad de resultados"
«La izquierda históricamente, en los últimos años especialmente, hace muchos esfuerzos por controlar la educación, los medios de comunicación, la cultura, el deporte... ha intentado politizar hasta el fútbol. Desde la derecha por lo único que se aboga es por la libertad individual y no por entrar en esos espacios», ha criticado, al tiempo que ha incidido en que él aboga por que tiene que haber «pluralidad y diversidad de ideas».
Así, respecto al ámbito educativo, ve crucial fomentar «la igualdad de oportunidades y no la igualdad de resultados» y «buscar la excelencia». Además, ha criticado que la izquierda impulse leyes generales y de universidades que van enfocadas «en denigrar el sistema educativo» y para que «apruebe todo el mundo sin demasiado esfuerzo», lo que, a su juicio, hace que «pierda valor el sistema educativo» y también «los trabajadores».
Considera que el PP debe dar «todas las batallas en todos los espacios» y ahí subraya el papel que tienen los jóvenes. «Somos los que más ganas tenemos, los que más ideas frescas tenemos. Creo que tenemos que estar bien organizados para que nuestras ideas, que pienso en muchísimas ocasiones que son brillantes, lleguen, calen. No solo en lo que es estrictamente político sino culturalmente, socialmente, económicamente... Que nuestras ideas sean influyentes», ha declarado, para a continuación proclamar que quiere que NNGG sea «el mayor 'think tank' de Madrid».
Así, de cara a la convocatoria electoral, Dancausa ha puesto en valor que el PP arrasó entre los jóvenes el 4M pero reconoce que hubo «mucho voto prestación por la situación concreta que había de pandemia». «Nuevas Generaciones tiene que encargarse de fidelizar ese voto, intentar que se quede», ha apuntado.
"premiar la meritocracia"
En cuanto a su equipo, aún no habla de nombres pero explica que quiere premiar «la meritocracia, el haber demostrado las ganas de movilizarse, de trabajar altruistamente». El nuevo presidente de la organización quiere gente «con ideas» y, aunque no cierra puertas a jóvenes que ya tengan cargo público, pone el foco en que hay «muchísimos perfiles» de personas desconocidas creativos «con ganas de trabajar».
«Hace falta renovar y rejuvenecer mucho la organización. Al final un afiliado de NNGG, por estatutos, lo es desde los 18 a los 31 y al llevar tanto tiempo sin renovar todo el mundo estaba más cerca de los 31, incluso de los 35, que de los 18. Así es complicado conectar con la gente de esa edad», ha señalado.
Contar con gente que desde muy joven se implique y a la que le queden alrededor de diez años por delante en NNGG es, a su parecer, «lo que va a dar continuidad, frescura» y la posibilidad de conectar con la gente que acaba de salir del instituto. Para Dancausa, ese es el momento en que la gente «tiene más ganas de movilizarse».