El pleno ordinario que se celebra este jueves en el Ayuntamiento de Bilbao ha quedado suspendido, pasadas las once de esta mañana y durante cinco minutos, tras la irrupción en el salón de plenos de agentes de la Policía Local que protestaban por sus condiciones laborales.
Durante el debate de las propuestas del equipo de gobierno, trabajadores de la Policía Municipal de Bilbao han irrumpido en el salón de plenos para denunciar su situación laboral, y la edil de Seguridad Ciudadana, Amaia Arregi, que preside el pleno, este jueves les ha pedido que abandonaran el pleno.
Arregi les ha dicho que, en el Ayuntamiento, «toda la ciudadanía es bienvenida, pero hay unas normas que respetar», y les ha indicado que no tenían uso de la palabra. Por ello, les ha rogado que, «al no estar atendiendo a las normas que se exigen en este pleno», abandonen el salón de plenos.
Tras reiterar por tercera vez su petición a los agentes que protestaban para que salieran del salón del pleno y advertirles que, de lo contrario, serían expulsados, Arregi ha decidido suspender el pleno para proceder al desalojo de los trabajadores de la Policía Local, que han pedido la dimisión de la concejal de Seguridad y del director de la Policía Municipal de Bilbao, Adolfo Alustiza.
Los trabajadores de la Policía Local, que han estado desde el inicio del pleno a las nueve de la mañana concentrados en el exterior del Ayuntamiento, tras una pancarta con el lema «Contra el deterioro de la Policía Municipal. Solución ya», han sido finalmente desolojados y el pleno se ha reanudado.