El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado que en los próximos días se aprobará una «importante batería de nuevas autorizaciones» para nuevas plantas fotovoltaicas en los próximos días.
Así lo ha indicado el president en su respuesta a la síndica de Compromís, Papi Robles, en la sesión de control de Les Corts, donde ha señalado que «cada día que pasa con menos renovables, peor», por lo que ha instado a «acelerar la transición energética».
Además, ha señalado que durante los primeros meses de 2022, se ha puesto en marcha un tercio de las instalaciones de energía renovable de autoconsumo que tiene la Comunitat Valenciana y ha indicado que en el presupuesto de 2023 se mantendrá el apoyo de cinco millones de este año a las instalaciones de autoconsumo.
La pregunta de Robles, en concreto, se refería al papel de las ciudades en esta transición ecológica e implantación de renovables. La síndica ha criticado las instalaciones de energía masivas que no cambian el modelo de la energía actual, sino que añaden la etiqueta «renovable».
En contrapartida, ha defendido las comunidades energéticas locales y que «la energía se produzca allá donde se necesite» y que se corresponda con «todas las necesidades que la ciudadanía tiene».
Puig ha indicado, en respuesta, que la Comunitat Valenciana fue pionera en 2020 en poner en marcha líneas de ayudas para las comunidades energéticas locales y que espera que haya una en cada municipio para 2030. Además, ha expresado su deseo de que se firme el Pacto por la Energía en breve.
Preguntas
Las energías renovables y el cese de Mireia Mollà --desencadenado por sus críticas a la lentitud de la tramitación-- han sido uno de los principales temas de las preguntas de los diputados. El parlamentario de Ciudadanos Carlos Gracia ha preguntado al Consell si el cambio agilizará la instalación de renovables.
En su respuesta, el conseller de Economía, Rafael Climent, ha prometido que en los próximos días «irán saliendo en cascada» todas las peticiones de nuevas plantas fotovoltaicas. Además, ha defendido que «el primer eje del Botànic es la lucha contra el cambio climático» y ha destacado los 131 millones de euros destinados al uso en el departamento que dirige para este año.