El PSE-EE plantea ampliar a 2023 la rebaja del 50% al transporte público vasco y aumentar las deducciones por alquiler de vivienda, tanto a arrendatarios como arrendadores, como medidas de ayudas a la ciudadanía ante la alta inflación, que supondrán un coste de 180 millones de euros. Los socialistas ya han trasladado estas propuestas al PNV, que todavía no ha ofrecido una respuesta, al considerar que no son «inalcanzables».
En una comparecencia de prensa celebrada en la sede del PSE-EE de Bilbao para analizar la actualidad política, el secretario general de los socialistas vascos, Eneko Andueza, y la secretaria de Política Institucional de la Ejecutiva, Begoña Gil, han destacado que los socialistas han cerrado este martes por la mañana una propuesta que impulsarán en todas las instituciones vascas en materia de transporte y la política de vivienda.
En este 25 de octubre, 43 aniversario del Estatuto de Gernika, y jornada en la que el Gobierno Vasco aprueba el anteproyecto de Ley de Presupuestos para 2023, el líder del PSE-EE ha afirmado que su objetivo es alcanzar un compromiso «para habilitar nuevas ayudas al transporte en 2023 y que estén garantizadas durante todo el ejercicio».
«Las instituciones vascas tenemos que ejercer nuestra responsabilidad. Quiero recordar que ésta es una competencia nuestra y que como responsables de la misma, tenemos que dar una respuesta eficaz a la ciudadanía. Ahora que algunos se empeñan en hablar de competencias, todos los días y como única bandera, es el momento de responder de forma adecuada, con las que podemos hacer aquí y con lo que podemos hacer ahora», ha remarcado.
En este sentido, ha recordado que, hace poco más de 10 días, el Consejo Vasco de Finanzas aprobó una deflactación del 2% para el próximo ejercicio, y los socialistas plantearon que «era una medida claramente insuficiente en un contexto de inflación» como el existente. «Entendemos que las instituciones vascas pueden y deben adquirir un mayor compromiso y la apuesta por el transporte público es un claro ejemplo», ha asegurado.
La segunda de sus propuestas plantea modificaciones en la fiscalidad que requieren «una reflexión profunda», para «favorecer el acceso a la vivienda contribuyendo a fortalecer el mercado del alquiler y, al tiempo, moderar los precios».
180 millones
El coste de estas medidas ronda, según sus cálculos, los 180 millones de euros y ha comparado esta cifra con la deflactación anunciada en julio y alguna medida fiscal que la acompañó y que supondrán una merma fiscal de 250 millones de euros.
Begoña Gil, que ha desgranado las propuestas, ha señalado que su intención es extender en 2023 las ayudas al autobús, metro, tranvía u otros medios de transporte públicos dependientes de las instituciones vascas, tal como se hace desde el mes de septiembre, con una rebaja importante del coste de sus viajes.
"Nuestro objetivo es que, además de la gratuidad de los servicios de
Renfe Cercanías y Media Distancia, que ya ha garantizado el Gobierno de
España, se renueve la rebaja del 50% en el resto de operadores", ha remarcado.
Vivienda
En cuanto a Vivienda, propone incrementar las deducciones para los arrendatarios (que ahora son del 20% y de entre el 25% y el 30% para determinados colectivos) hasta el 50%, al menos para las personas menores de 35 años, las familias numerosas y los colectivos de especial necesidad. Con carácter general, sería del 35%.
Por otro lado, quiere aumentar las deducciones que pueden aplicarse a los arrendadores, "siempre que mantengan las rentas de sus inmuebles en
línea con la renta media de la estadística del mercado del alquiler que
publica el Gobierno Vasco".