La población sin hogar atendida en 2022 en centros de alojamiento y comedores sociales de Euskadi asciende a 4.456 personas, un 113% más que en 2012 y el equivalente a 2 de cada 1.000 habitantes. En cuanto a sus características, el 78,2% son varones y el 72,4% de origen extranjero, aunque según datos elaborados por el Instituto Vasco de Estadística, Eustat.
El perfil de la persona sin hogar que reside en Euskadi es un hombre joven, de entre 18 y 44 años, soltero, con estudios secundarios, en paro y de origen extranjero en el 72,4% de los casos, porcentaje que ha aumentado desde 2012, cuando representaban el 60,1% del total.
Por Territorios Históricos, el 43,7% de la población sin hogar de Euskadi es atendida en centros de Bizkaia y Bilbao es la capital con mayor número de personas sin hogar. En Gipuzkoa, el 43% se encuentra en San Sebastián, mientras que en Álava todas las personas son atendidas en la capital.
El Eustat considera destacable el aumento registrado en cuanto a las personas atendidas en Gipuzkoa entre 2012 y 2022 (180,4%) y en Álava (132,3%), en comparación con el producido en Bizkaia, un 70,9%.
En cuanto al tipo de alojamiento del que las personas encuestadas son usuarias, el 23,3% duerme en un alojamiento colectivo, el 54,9% en pisos o pensiones cedidas por una entidad pública u ONG y el 21,5% restante en otros lugares no previstos para ser habitados. El 37,5% lleva más de 3 años sin un alojamiento propio.
Otras carencias detectadas son que el 2% declara no haber comido el día de la entrevista y el 31,8% no tiene ingresos. Sí los tiene un 22,6% de ellos, procedentes de una prestación social (incluida la RGI) y procedentes de donaciones de ONG en el 16,3% de los casos. Casi el 60% de las personas entrevistadas declaran que el principal gasto lo destinan a la comida.
Géneros
Por género, las personas sin hogar son hombres en un 78,2% de los casos, frente al 21,8% que son mujeres. De modo similar, en el conjunto de España, se trata de hombres en un 76,7% de los casos. Entre los hombres sin hogar, el 23,3% tiene nacionalidad española y el 76,7% restante tiene nacionalidad extranjera.
En el caso de las mujeres de este colectivo, estos porcentajes no difieren tanto, ya que el 43,1% tiene nacionalidad española y el 56,9% restante nacionalidad extranjera, aunque el Eustat destaca el aumento registrado de mujeres sin hogar dentro del colectivo, así como de las jóvenes y extranjeras.
En cuanto a la distribución por continentes, las personas extranjeras proceden principalmente de África (81,2%), seguido de América (11,4%) y de Europa (5%). Por países, la mayor parte proviene de Marruecos (47,9%) y de Argelia (11,3%).
Por edades, entre la población atendida destaca el grupo de jóvenes entre 18 y 29 años, el cual supone el 37,4% del total, seguido del grupo de 30 a 44 años (32,7%), del de 45 a 64 años (27,6%) y el de los mayores de 65 años, el menos numeroso, con el 2,2%. En el conjunto de las comunidades autónomas, el grupo más numeroso es el de personas entre 45 y 64 años, que supone el 43,3%.
Causas
Por otro lado, si se atiende a las causas que llevaron a las personas encuestadas a encontrarse sin hogar, se observan diferencias en 2012 y en 2022 en cuanto a las principales razones, ya que en 2022 se trata, principalmente, de la emigración (47,3%) y en 2012 era la pérdida de empleo (25,6%).
Otro aspecto a tener en cuenta de los datos recogidos son los estudios terminados de los encuestados. El 48,3% tiene estudios secundarios, seguido por el 32,8% que dispone de estudios primarios y el 9,5% que manifiesta haber cursado estudios universitarios. El 9,2% de las personas sin hogar declara no tener ninguna formación. En cuanto a la relación con la actividad, sólo el 4,4% afirma tener una ocupación.
Respecto a la salud, en este colectivo, el 27,6% padece una enfermedad grave o crónica, el 15,5% tiene una discapacidad y el 19,6% ha sido hospitalizado en el último año. En cuanto a las adicciones, el 66,4% y el 70,4% no consume ni alcohol ni drogas, respectivamente, si bien, el 13% señala ser consumidor de hachís o marihuana.
A los problemas de salud, se añaden los de inseguridad, puesto que el 10,9% de las personas sin hogar ha sido víctima de agresiones y el 16% de robos. Por otro lado, el 28,1% ha sido detenido en alguna ocasión. En este grupo, son hombres el 88,5% y mujeres el 11,5%. Con relación a los servicios sociales, el 84% de las personas sin hogar ha tenido contacto con personal de los servicios sociales y la valoración de la ayuda recibida es favorable en un 59,6% de los casos.