Los presidentes de Andalucía y de Aragón, Juanma Moreno (PP) y Javier Lambán (PSOE), han coincidido este jueves, con motivo de la reunión que han celebrado en Sevilla, en reclamar al Gobierno de la nación la reforma del modelo de financiación autonómica, aunque han dudado de que se vaya a abordar antes de las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo de 2023.
Juanma Moreno ha recibido en el Palacio de San Telmo de Sevilla a su homólogo aragonés, en el marco del denominado 'I Encuentro Andalucía-Aragón', en el que han abordado asuntos de interés para ambos territorios, como la necesidad de que se construya la autopista central ferroviaria, que uniría Zaragoza con el puerto de Algeciras (Cádiz).
El presidente de la Junta de Andalucía ha manifestado que lo que tienen claro absolutamente todos los presidentes autonómicos es que el actual modelo de financiación autonómica está «ya caduco y hace falta actualizarlo» y es algo que se debe abordar por consenso, pero el Gobierno central de turno tiene que asumir el liderazgo de sentar a los responsables en el ámbito político y autonómico.
Por su parte, el presidente de Aragón ha considerado que todas las comunidades están «infrafinanciadas» y que cada vez tienen más dificultades para afrontar el coste de los servicios públicos esenciales, como la sanidad. Ha indicado que este asunto está abierto desde el año 2014 y si hasta ahora no hemos sido capaces de abordarlo, de aquí a las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2023 «no va a ser el mejor momento».
En cuanto al asunto de la fiscalidad, Lambán ha considerado que sería buena cierta «armonización» fiscal en España, pero acordada por las comunidades y no «impuesta» por parte del Gobierno central. Ha señalado que defiende a «capa y espada» que las comunidades tienen que tener un pequeño margen de autonomía a la hora de decidir sus impuestos. «Cada comunidad tiene el derecho a ejercerlo como estime conveniente», según ha indicado.
Por su parte, Moreno ha defendido las últimas medidas fiscales adoptadas por su Gobierno y ha expresado el «máximo respeto» a lo que hace cada comunidad con sus impuestos y en cuanto a las decisiones que adopta en ese «margen pequeñito» que tienen en materia de impuestos cedidos.