El Oceanogràfic de València, uno de los principales acuarios a nivel mundial y el más grande de Europa, ha conseguido reducir sus emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) un 40 por ciento desde 2017.
Para ello, el acuario valenciano, con cerca de 24 millones de viistantes, está desarrollando una estrategia de sostenibilidad para luchar contra el cambio climático en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, centrada principalmente en el ODS 13 de acción por el clima y el ODS 14 de vida submarina.
Entre las inversiones del acuario para lograr disminuir la huella de carbono, se incluye la mejora en eficiencia energética con la sustitución de equipos de climatización más eficientes o la incorporación de nuevas zonas de aparcamiento para bicicletas, según ha informado el Oceanogràfic en un comunicado.
Con el fin de mejorar el bienestar de los animales y el confort climático de los visitantes, el acuario ha instalado una enfriadora de absorción que permite completar y actualizar la tecnología de enfriamiento con un equipo más sostenible con el medio ambiente, con lo que ha logrado disminuir el consumo eléctrico año tras año.
Además, el acuario valenciano ubicará próximamente puntos de recarga para coches eléctricos en el aparcamiento de visitantes y colocará nuevas placas solares fotovoltaicas destinadas al autoconsumo eléctrico.
Estos elementos, además de reducir el perjuicio directo en mares y océanos, «representan el modelo de economía circular y descarbonizada que el centro está implantando como referente de su estrategia sostenible».
El Oceanogràfic calcula y registra anualmente sus emisiones de efecto invernadero en el Ministerio para la Transición Ecológica y ha obtenido el sello 'Calculo y Reduzco' al reducir la intensidad de emisión entre 2018-2020 respecto a los tres años anteriores.
La cuantificación de las emisiones de GEI es el principal indicador de la estrategia de sostenibilidad del Oceanogràfic, que fue el segundo acuario del mundo -por detrás del Acuario de Sevilla- que certificó y registró su Huella de Carbono en sus Alcances 1, 2 y 3, y que emitió Aenor por primera vez en 2019.
Elemento "transversal"
La sostenibilidad en el Oceanogràfic tiene un aspecto ambiental y otro social, por lo que se trata de un elemento «transversal» que afecta a todas las áreas del centro.
En el ámbito ambiental, además del cálculo de la huella de carbono, son muchos los programas de conservación y reintroducción de especies amenazadas que lleva a cabo la Fundación Oceanogràfic.
En el aspecto social, el objetivo del Oceanogràfic es comunicar el impacto sobre el cambio climático tanto a los cientos de miles de personas que visitan anualmente el acuario como al resto de la ciudadanía para concienciar y sensibilizar con el fin de generar cambios de actitud hacia la sostenibilidad.