El municipio vizcaíno de Barakaldo instalará de forma gratuita detectores de humo en los hogares de las personas mayores de 80 años que vivan solas y que, según el padrón, superan las 2.500.
Asimismo, se elaborará un estudio de necesidades sociales de los destinatarios del servicio que servirá para mejorar los servicios que se ofrecen desde el Área de Acción Social, según ha informado le Consistorio.
La alcaldesa, Amaia del Campo, ha presentado este lunes el proyecto, que en los próximos días se abrirá a la presentación de ofertas por parte de las empresas interesadas en gestionarlo.
«Con este contrato se pretende minimizar los riesgos de incendios en un colectivo de riesgo como son las personas mayores que viven solas», ha explicado la alcaldesa. Para ello, se analizarán los aspectos relacionados con el entorno físico de la vivienda, se identificará los posibles focos de riesgo de incendios derivados del mal estado y conservación de las instalaciones de gas, calderas, instalación eléctrica, ventilación, estufas, cocinas y demás equipamientos y se procederá a la instalación completamente gratuita de los detectores de humo.
Por último, se realizará una valoración de la autonomía y detección de deterioros cognitivos, sensoriales, de movilidad, aislamiento social, apoyos familiares o de la comunidad y otras necesidades sociales y de autonomía de las personas mayores.
Los detectores de humo que se instalen en los hogares de las personas mayores de 80 años que vivan solas avisarán de la presencia de humo mediante una alarma sonora «muy fuerte».
«Con esto buscamos no solo que lo puedan escuchar las personas usuarias, sino también sus vecinos y vecinas», ha indicado Del Campo, que ha incidido en que la alarma permite reducir los tiempos de alerta para salvar vidas y también minimizar los daños en la vivienda.
Además, se tratará de aparatos autónomos que funcionarán con una batería, lo que permite contar con «una pequeña central de emergencias sin necesidad de obras».
Con este servicio se va a poder conocer directamente las necesidades de cada usuario, prever y prevenir las posibles y potenciales necesidades que se puedan producir, y mejorar el entorno físico y social de estas personas mayores.
«Barakaldo está viviendo su segunda gran transformación social y urbana, y las personas están en el centro de las actuaciones municipales para dotar a nuestros vecinos de unos niveles de calidad de vida que les hagan sentirse orgullosos de vivir en nuestra ciudad», ha indicado Del Campo.
Asimismo, ha resaltado que las personas mayores forman parte de los «ejes estratégicos» de la Agenda Urbana barakaldesa entre los que están la digitalización de los cuidados y la reducción de la brecha digital con las personas mayores, así como la mejora de la accesibilidad en espacios públicos, transporte y trámites con la administración.
Por otro lado, el Ayuntamiento barakaldés comenzará esta semana a trabajar con el proyecto 'Begirada Adia', destinado a las personas mayores de 80 años que viven solas y que nunca han tenido contacto con los servicios sociales. El objetivo pasa por ofrecerles oportunidades para generar nuevas relaciones sociales atajando así problemas de soledad no deseada.