El Ejecutivo aragonés ha aprobado este lunes, en su reunión de Consejo de Gobierno, el Decreto por el cual se declara Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de conjunto de interés cultural, Lugar de Memoria Democrática de Aragón, la fosa común, el muro de fusilamiento y los monolitos memoriales que recuerdan a las víctimas de la Guerra Civil y a las víctimas deportadas de los campos de concentración nazis existentes en el cementerio de Ejea de los Caballeros (Zaragoza).
Esta declaración pretende garantizar su valoración, preservación y protección como símbolo de homenaje y reconocimiento a las víctimas, tal y como anunció el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, durante la celebración del Día de la Memoria Democrática del pasado mes de marzo.
El Decreto explica que en el cementerio de Ejea se encuentra la fosa donde reposan los restos de las víctimas de la violencia política desatada por el golpe de Estado del 18 de julio de 1936 contra vecinos de esa localidad y de otras de donde fueron llevados para ser asesinados.
En el lugar de la fosa, el Ayuntamiento erigió en el año 2008 un monumento memorial con los nombres de los 417 fusilados --388 hombres y 29 mujeres- -pertenecientes a un total de 30 localidades. De estas víctimas, 364 fueron registradas en la cárcel ejeana desde el 18 de julio al 31 de diciembre de 1936 y fusiladas en esos meses del llamado «terror caliente».
Según la documentación, la mayoría eran militantes y simpatizantes de las organizaciones que formaban el Frente Popular. La comarca de las Cinco Vllas destacó en Aragón por su protagonismo reformista y de activismo político y sindical durante la II República, pero también por la magnitud de la represión contra la población civil tras el golpe de Estado de 1936.
Un lugar especialmente utilizado para los fusilamientos fueron las tapias del cementerio de Ejea, de ahí que formen parte de la declaración como Lugar de Memoria Democrática. En el año 2016, próximo al monumento memorial a las víctimas de la represión franquista, se erigió un monolito con motivo del 70 aniversario de la liberación del campo de concentración nazi de Mauthausen, donde siete ejeanos fueron deportados, de los que solo tres sobrevivieron.Lugar de Memoria Democrática de Aragón.
El cementerio de Ejea de los Caballeros se suma a una lista de enclaves que el Gobierno de Aragón ya ha declarado como Lugar de Memoria Democrática, de acuerdo a la Ley autonómica de Memoria Democrática: el Barranco de la Bartolina, en Calatayud; la cárcel de Benabarre; la Cueva del Polvorín en Farlete, Refugio antiaéreo de Robres y Cueva del Castillo en Monegrillo (Ruta de Memoria); la Tapia del cementerio de Torrero de Zaragoza, y la tumba de María Domínguez, en Fuendejalón.
El Gobierno de Aragón está trabajando también en declarar Lugar de Memoria otros los pozos de Caudé, las rutas de Torrero, la Línea del Cinca y el frente del Ebro en la zona de Fuentes de Ebro y Belchite. En este último, se trabaja de manera conjunta con el Gobierno de España en un proceso participativo para su resignificación.
La legislación aragonesa define el Lugar de Memoria Democrática como «aquel espacio, construcción o elemento inmueble cuyo significado histórico sea relevante para la explicación del pasado de Aragón en términos de participación, defensa y lucha a favor de la democracia frente a la intolerancia y la dictadura en el marco histórico de la Segunda República española, la Guerra Civil y la dictadura franquista».