Hoy jueves, 1 de septiembre, entra en vigor la actualización de los importes de la Tarjeta Familias (TF) del Ayuntamiento de Madrid en un 10%, para compensar el efecto de la inflación, ha informado la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
Esto quiere decir que el importe más bajo de la Tarjeta Familias pasa de 125 a 138 euros mensuales, y el más alto pasa de 630 a 696 (los importes de la TF se establecen en función de la renta per capita familiar, del número de miembros en el hogar y de la presencia de menores).
Además, Villacís ha recordado que hace cuatro meses ampliaron en un 40% los límites de renta para acceder a la Tarjeta Familias, pasando de un umbral de 1.000 euros mensuales a un umbral de 1.400, permitiendo así el acceso a las ayudas a un mayor número de familias. El límite de renta no es per capita, sino total: por encima de 1.400 euros de ingresos en el hogar no se concede la TF, han indicado a Europa Press desde el Área de Familias del Ayuntamiento.
«A día de hoy se han entregado 18.000 tarjetas familias, de las que se han beneficiado 55.000 personas. Somos conscientes de que la situación puede ir cambiando y es un límite abierto un posible estudio para ir avanzando en el otoño», ha agregado.
Aumento de trabajadores sociales
En 2020 el Consistorio creó la Tarjeta Familias, una ayuda destinada a familias vulnerables para adquirir productos de primera necesidad, de las cuales ya se han entregado 18.000 que han beneficiado a unas 55.000 personas. También se aumentó en un 21,5% el número de trabajadores sociales en plantilla.
Por estos motivos, la vicealcaldesa ha defendido que se han adelantado al Gobierno central en las medidas sociales para proteger ese curso a los más desfavorecidos y que Madrid «está mejor preparado que nunca para apoyar a las familias más vulnerables en relación con la crisis».
Aun así, se va a llevar a cabo una valoración de los recursos y ayudas a disposición de la ciudadanía de cara a la previsión de una etapa de crisis vinculada al encarecimiento de la energía, a la inflación, y al deterioro de la economía y el empleo.
Tras esta valoración se adoptarán las medidas que se consideren más beneficiosas para las familias madrileñas. De momento, ya se está estudiando de qué manera pueden los servicios para mayores, como la Teleasistencia o el SAD, estar más cerca de las personas mayores en este invierno, señalan desde el Área que dirige Pepe Aniorte.
Begoña Villacís también ha subrayado que al igual que este verano «han informado a los mayores de las altas temperaturas, se han interesado por su situación y les han dado consejos para el calor, estamos trabajando para que pueda establecerse un protocolo similar para este invierno».
La Teleasistencia llega a 115.000 mayores de los 650.000 que hay en Madrid, y puede ayudar tanto a detectar situaciones de vulnerabilidad como a prevenir posibles problemas, añaden.