El vicepresidente de la Generalitat y conseller de Políticas Digitales y Territorio, Jordi Puineró, ha asegurado que evaluarán los daños provocados por la fuerte granizada de este martes en la Bisbal d'Empordà (Girona) para estudiar si lo declararán zona catastrófica.
En declaraciones a los medios este miércoles, el vicepresidente catalán ha afirmado que aún es pronto para saber si se declarará zona catastrófica, y ha pedido a los ciudadanos que se dirijan a las aseguradoras para reparar los daños, al igual que harán en el ámbito público.
Puigneró ha trasladado el pésame a la familia de la bebé de 20 meses que ha fallecido a causa de la granizada, y ha deseado la recuperación de las personas heridas leves que han sufrido lesiones y contusiones por el granizo.
Ha explicado que, tras la evaluación de los daños, se pondrán en marcha «los mecanismos para repararlos», y se ha puesto a disposición del Ayuntamiento de la Bisbal y del Consell Comarcal del Baix Empordà para ayudar en las labores de reparación.
«El cambio climático no es una broma», ha sostenido Puigneró, que ha apelado a la responsabilidad local para mitigar los efectos de la crisis climática, y ha destacado las medidas del Govern para luchar contra los fenómenos derivados como la sequía, los incendios y este tipo de granizadas.
Línea de ayudas
La consellera de la Presidencia de la Generalitat, Laura Vilagrà, ha asegurado que la afectación material por la tormenta de granizo «es muy grande» y que se está acabando de evaluar las afectaciones que se han producido y, tras ello, se mirará «qué ayudas concretas» se ofrecen.
En este sentido, ha recordado que la Generalitat tiene una línea de ayudas ante situaciones de emergencia como el de esta tormenta, y ha apuntado a que los daños se han producido en industrias, cubiertas rurales, edificios, cristales y coches privados.
También ha mostrado su consternación por la bebé que ha muerto después de ser herida por la tormenta de granizo y ha asegurado que la familia «ya está recibiendo apoyo psicológico» por parte de la Conselleria de Salud, así como el resto de personas afectadas por la fuerte tormenta.
Autoridades locales
La alcaldesa accidental de la Bisbal d'Empordà, Carme Vall, ha pedido a los ciudadanos que «vigilen al pasar por las aceras porque hay tejas que han podido quedar sueltas que pueden caer y haber problemas», y ha explicado que la Conselleria de Educación ha enviado a un técnico para evaluar los daños ocasionados a escuelas de La Bisbal, ante la llegada del inicio de curso el 5 de septiembre.
El jefe de la policía local de La Bisbal, Josep Manel Costa, ha hecho un llamamiento a la ciudadanía a que revisen los tejados de sus viviendas con las aseguradoras ya que tras la tormenta podrían suponer un peligro, y también ha explicado que Protecció Civil está a pie de calle informando sobre cómo reclamar a sus seguros los daños materiales ocasionados.
Por su parte, los Mossos d'Esquadra han estado coordinando con las policías locales de municipios afectados por el granizo para dar «seguridad tanto a las personas como a los edificios», y también han dado acompañamiento a la familia de la bebé fallecida.
El presidente del Consell Comarcal el Baix Empordà, Joan Loureiro, ha explicado que ha habido una «afectación importante» a los cultivos de la zona, sobre todo de maíz, y también destrozos en los techos de establos, muchos de uralita, por lo que habilitarán un espacio para recoger este material y eliminarlo de forma correcta.