El sindicato USO asegura que la aerolínea Iberia Express ha cancelado un total de 92 vuelos --14 de ellos en el aeropuerto de Sevilla-- «por temor al impacto de la huelga de tripulantes» que comienza este domingo. La organización asegura que, ante la movilización de 532 trabajadores, la aerolínea dejará sin operar los vuelos no protegidos por los servicios mínimos decretados por el Gobierno.
USO ha convocado a los tripulantes de cabina de Iberia Express a diez jornadas de huelga, que comenzarán el 28 de agosto y se extenderán hasta el 6 de septiembre, con el objetivo de desbloquear la negociación del convenio colectivo y adecuar sus salarios a la subida del coste de la vida, ya que los sueldos llevan congelados desde 2015.
El sindicato asegura que entre los vuelos cancelados se encuentran las conexiones de Madrid con Palma de Mallorca, Gran Canaria, Santiago de Compostela, Sevilla, Málaga y Tenerife Norte. Con ello, alrededor de unos 17.000 pasajeros se verán afectados por estos vuelos cancelados por la compañía, según el sindicato
En el caso de Andalucía, los vuelos cancelados son todos enlazando Sevilla y Madrid. En concreto, dos vuelos --ida y vuelta-- el 2, 3 y 5 de septiembre y cuatro vuelos --dos idas y dos vueltas-- los días 4 y 6 del mismo mes.
«Con estas cancelaciones, Iberia Express no se arriesga a que los aviones no salgan porque las tripulaciones secunden la convocatoria de huelga. Esta decisión deja bien claro que la aerolínea es consciente del malestar de su plantilla pero, sin embargo, no acude con propuestas a las reuniones que se han mantenido a lo largo de esta semana y en las que USO ha mostrado su disposición a desconvocar la huelga», denuncia Estefanía Díaz, delegada de USO en Iberia Express.
El sindicato reclama propuestas sobre la mesa «que dejen de precarizar» sus condiciones laborales. Hoy se vuelven a reunir con la compañía, en la mesa negociadora del convenio, confiando en llegar a acuerdos que posibiliten la desconvocatoria de la huelga.
«Han sido ocho meses en los que la dirección de Iberia Express ha tenido la oportunidad de negociar y traer propuestas realistas pero ha preferido marear a sus trabajadores y utilizar a los pasajeros como rehenes a sentarse a negociar de manera honesta y profesional», concluye Díaz.