La portavoz del grupo municipal socialista del Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera, ha exigido al Gobierno de la ciudad PP-Cs que asuma la responsabilidad de poner fin a la prolongada huelga de autobuses urbanos y pida disculpas a la ciudadanía, porque «mientras los vecinos están en las paradas, el alcalde está de vacaciones».
La huelga de los trabajadores de la empresa concesionaria del servicio de autobús urbano de la ciudad, Avanza, ha alcanzado ya los 550 días, convirtiéndose en la más larga que ha conocido la capital aragonesa.
Ante esta situación, la portavoz municipal del PSOE ha criticado que el gobierno de la ciudad, presidido por el alcalde Jorge Azcón, «ha decidido que el mes de agosto se puede ir de vacaciones, tanto él, como su consejera y los coordinadores de área, y no resolver la huelga».
Ranera ha alegado que hay vecinos de Zaragoza que durante este mes permanecen en la ciudad y se encuentran con largas esperas para coger el autobús, en un contexto de alerta por altas temperaturas como el que se está viviendo este verano. Por eso, desde el grupo municipal socialista han lamentado que el equipo de gobierno se haya «desentendido de los problemas locales» y «no haya sido capaz de asumir la responsabilidad de resolución del conflicto».
«Este alcalde ni está, ni se le espera», ha sentenciado la portavoz socialista, «y, mientras tanto, los vecinos sufriendo la huelga del bus». Según Ranera, en un momento en el que Europa está insistiendo en la lucha contra el cambio climático, se deberían priorizar los servicios públicos como principal instrumento de movilidad y, además, esta huelga no está contribuyendo a recuperar la confianza de los usuarios respecto al autobús.
Medidas propuestas por el psoe
La portavoz socialista ha recordado que, hace una semana, su grupo solicitó tres materias para resolver la huelga. En primer lugar, una auditoría externa para conocer la situación financiera de la empresa. En segundo lugar, datos sobre el estado de la negociación entre los trabajadores y Avanza. Y en tercer lugar, la gratuidad del billete durante las horas de paro del bus y la devolución proporcional de los títulos de abonos a los ciudadanos.
Ante la falta de respuesta, los socialistas han vuelto a requerir datos sobre la ocupación de autobuses, la estimación de usuarios afectados y sus reclamaciones, número de kilómetros que se han dejado de recorrer o los posibles ahorros durante estos 550 días, así como la inclusión de un mediador para las negociaciones y, de nuevo, la gratuidad del billete.
Ranera ha subrayado la importancia de la «transparencia», «que no se ha dado durante este periodo de huelga» y ha repasado las cifras que el Consistorio recibió por parte del Gobierno de España: «En el año 2021 dio a esta ciudad 6,6 millones de euros más en materia de transporte de lo que había presupuestado el Ayuntamiento de Zaragoza, con un total de más de 33 millones de ayudas del Estado».
Asimismo, ha expuesto que el año que viene vencen los pliegos del autobús y el ejecutivo municipal deberá preparar los nuevos, que han acumulado casi 900 millones de euros en esta última década, para considerar que será «imposible pedirles que sean capaces de hacer los pliegos más importantes de la ciudad».
La portavoz ha traído a colación el hecho de que, cuando Azcón era portavoz de la oposición, «a los 90 días de una huelga con Zaragoza en Común al frente del Consistorio exigió la figura de un mediador» que se implementó y logró poner fin al conflicto. Sin embargo, «el señor Azcón ha decidido que en este caso no era necesaria dicha figura y 550 días después la huelga sigue sin estar resuelta».
Ranera ha finalizado que desde el grupo municipal socialista «exigimos al alcalde que pida perdón, que ponga en marcha las medidas que hemos solicitado y que, de una vez por todas, resuelva los problemas de los vecinos».