El incendio forestal declarado en la noche del sábado en la Vall d'Ebo (Alicante) ha obligado a primera hora de este martes a cortar la carretera CV-712, que une este municipio con el de Pego, por la proximidad de las llamas.
En los tres días que lleva activo este fuego, provocado por un rayo, se han calcinado un total de 9.515 hectáreas en un perímetro afectado que supera los 65 kilómetros, según los datos aproximados difundidos este martes por el Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante.
Tras una noche en la que han trabajado alrededor de 300 efectivos en la extinción, durante la mañana de este martes se incorporaran paulatinamente 26 medios aéreos de la Generalitat, la Diputación de Alicante, el Gobierno y los cuerpos de bomberos de Castilla-La Mancha y Murcia, detalla el 1·1·2.
Durante la noche del lunes han trabajado en la zona hasta 300 personas: 28 dotaciones del Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante, nueve de los forestales de la Generalitat, cuatro brigadas del Gobierno y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
De momento, el incendio de la Vall d'Ebo ha calcinado al menos 9.500 hectáreas y ha obligado a desalojar más de 1.200 personas en el entorno y otras comarcas, como las poblaciones de Tollos, Beniaia, Fageca y Famorca este lunes por la tarde.