La provincia de Sevilla ha registrado tanto la temperatura máxima más alta como la mínima más elevada de toda Andalucía desde el 1 de julio, con 46 y 28,9 grados respectivamente. Mientras que la primera efeméride tuvo lugar en la localidad de Morón de la Frontera el 24 de julio, la segunda se encontró en el barrio de San Pablo de la capital hispalense el 25 del pasado mes. Cabe destacar, a su vez, que julio fue el mes más cálido en España desde el año 1961, en el que se registraron dos olas de calor.
En contraste con la del municipio de Morón, la máxima más baja se encontró en la estación de Huércal-Overa (Almería), donde el mercurio recogió 40,2 grados el 25 del citado mes, tal y como ha podido confirmar Europa Press a través de datos ofrecidos por Aemet. Por encima de la marca de este territorio se hallan las de las estaciones de Loja (Granada), con 42,3 grados el día 24; Estepona (Málaga), con 43 grados el 26 de julio; o de la Ronda Este de Huelva con 43,9 grados al pasado 25 de julio.
No obstante, las localidades de Doña Mencía (Córdoba) con 44 grados el 25 de julio, de Andújar (Jaén) con 44,2 grados el 24 y el aeropuerto de Jerez (Cádiz) con 44,5 grados han sido las que más cerca se han situado de ser el sitio donde mayor calor se ha registrado.
En cuanto a la mínima más elevada, los datos dejan nuevamente a la provincia de Sevilla en lo más alto del ranking, con los 28,9 grados anotados en la noche del 25 de julio en el barrio de San Pablo de la capital hispalense, solo 0,7 grados por encima de lo registrado el mismo día en Jaén capital, ubicada en segundo lugar. Seguidamente se sitúan Doña Mencía (Córdoba), con 28,1 grados el 25 de julio; El Arenosillo (Huelva), con 27,7 grados la noche del 26 de julio; Grazalema (Cádiz), con 27,4 grados el 15 de julio; el puerto de Almería y el aeropuerto de Málaga, que por los 26,7 grados que ambas registraron el 30 y el 31 de julio respectivamente comparten sitio; y Víznar (Granada), con 25,4 grados el 24 de julio
Julio, un mes "extremadamente cálido"
El último mes estuvo marcado por el impacto de dos grandes episodios de calor en Andalucía. El primero se trató de una ola «definida y grande» que además de a Andalucía llegó a expandirse a Galicia desde el 12 hasta el 18 de julio, tal y como ha especificado el delegado territorial de la Aemet en Andalucía, Ceuta y Melilla, Juan de Dios del Pino, que acto seguido ha explicado que «intervino una DANA que trajo aire del norte de África»
«Luego hubo otro episodio de altas temperaturas más localizado en Andalucía que también afectó al sur de Extremadura, al sur de Castilla La Mancha, a Murcia e incluso al valle del Ebro», ha comentado el delegado territorial sobre la segunda ola de calor, que fue de tres días: del 23 al 25 de julio, ambos inclusive. Esta segunda ola de julio cumplió «por los pelos» con los requisitos mínimos para que fuera considerada ola de calor, si bien
«ha sido intensa, con zonas en nivel rojo como el litoral de Huelva, que no es habitual, al margen de la campiña cordobesa». Aunque afectó a buena parte del territorio nacional, incluido Baleares, «estuvo especialmente restringida al sur de Andalucía» pese a que en este caso no hubo entrada de aire africano.
El pasado mes, que en palabras del portavoz del ente nacional, Rubén del Campo, ha sido «extremadamente cálido» y el que mayor temperatura media acumuló en España desde 1961, ha dejado en todas las zonas de Andalucía temperaturas máximas que no han bajado de los 40 grados tras haber superado en 0,2 grados a julio de 2015, que era hasta ahora el más caluroso de la serie.
Las anomalías térmicas llegaron a estar cuatro grados por encima de lo normal en puntos del interior de Andalucía, aunque estas fueran en algunos momentos de cinco grados. Las temperaturas máximas diarias quedaron, en promedio, 3,3 grados por encima del valor normal, mientras que las mínimas se situaron 2,2 grados por encima de la media, resultando una oscilación térmica diaria 1,1 grados superior a la normal del mes.
Asimismo, se ha tratado de un mes de julio que tuvo un carácter «muy seco», con una precipitación media sobre la España peninsular de 8,6 milímetros, que representa el 49% del valor normal del mes, a sabiendas de que el periodo de referencia para el análisis comprende desde 1981 hasta 2010. Se ha tratado del noveno mes de julio más seco desde el comienzo de la serie en 1961 y del más seco de los últimos quince años. Ha sido el tercero menos lluvioso del siglo XXI, por detrás de los meses de julio de los años 2005 y 2007.