El SoNna Huesca 2022 ha concluido de manera satisfactoria este primer fin de semana de agosto, a pesar de que se suspendiese la actuación del viernes, de Blanca Altable, en la ermita de San Juan de Peralta de Alcofea, a los pocos minutos de haber comenzado, a causa de fuertes rachas de viento.
Desde la organización, han apuntado que esa ha sido la única nota discordante del fin de semana, ya que este sábado tuvo lugar una fiesta en los Llanos de Planduviar, mientras este domingo se ha celebrado un recital en el abetal de El Cornato, en el valle de Pineta, en Bielsa.
Blanca altable en peralta de alcofea
Blanca Altable comenzó en solitario su recital de composiciones propias para violín, acompañada de su loop station, «ese nuevo instrumento» que graba y reproduce convirtiendo en cíclico cualquier sonido, transformando un violín en un cuarteto y un concierto en una performance contemporánea, han indicado desde SoNna Huesca. Así, la violinista burgalesa superponía capas rítmicas antes de afrontar la línea melódica de cada uno de sus temas.
El loop station se inventó hace varias décadas, pero es ahora cuando se ha convertido en el instrumento de moda, o de época, y Blanca Altable lo ha incorporado a su música para transformar sus influencias del folk en propuestas bellas, pero completamente distintas.
Después, se sumó al escenario la voz de Hache, que improvisó poemas y textos para que resonaran entre las notas de violín. Pero la atmósfera poética fue efímera, ya que la tormenta trajo toda la tierra de los campos de alrededor al recinto. Pasados unos minutos, la organización y los artistas comunicaron la imposibilidad de seguir con el recital, que duró cuarenta minutos.
Cita en planduviar
El asunto era que las previsiones para el sábado en Broto, en ese idílico espacio que son los llanos de Planduviar, eran casi peores, pero al final la tormenta se retrasó lo justo para que el concierto se pudiera celebrar. Y menos mal. Porque por Planduviar también pasó un ciclón, otro, que en este caso tenía la forma de una mujer menuda.
La asturiana Lorena Álvarez cautivó al público en esta tercera edición del SoNna Huesca, acompañada de sus músicos habituales --laúd y guitarra portuguesa-- y de un contrabajo fichado a última hora de entre sus amigos altoaragoneses.
La artista mantuvo al público con la sonrisa en la boca durante hora y media y llevó al SoNna Huesca «vitalidad y ganas de vivir», a lo que se sumó la llegada de los rondadores chesos; otro cuarteto de guitarra, guitarro, bandurria y violín, junto a los que repasó el EP de cuatro canciones que grabaron juntos en Hecho en 2020, tras su estancia de dos meses en el certamen Lo Mon Contemporáneo. Entre los últimos temas, a capela, cantaron 'S'ha feito de nuei', a petición del público.
Cissoko-brotto
La tormenta ha retrasado la actuación de este domingo, protagonizada por el acordeón diatónico del francés Cyrille Brotto y la kora --instrumento africano de cuerda, mezcla de arpa y laúd de 20 o 21 cuerdas-- y la voz del senegalés Ablaye Cissoko.
Cissoko se ha levantado para introducir e interpretar una canción dedicada a todos los africanos, hombres y mujeres, «que intentan atravesar el mar o el océano para encontrar una vida mejor». Uno y otro se han expresado en francés y la mayoría del público ha entendido sin problema.