El Ayuntamiento de Barcelona prepara una instrucción interna sobre medidas de ahorro energético fundamental para «garantizar la soberanía energética» y también contribuir en la lucha contra el cambio climático que afectará a edificios municipales y comunicarán entre este viernes por la tarde o el sábado.
«El Ayuntamiento de Barcelona cumplirá las normas que vengan o del Govern de Catalunya o del Gobierno del Estado también en el ámbito del ahorro energético», ha defendido el primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en la rueda de prensa sobre las obras de remodelación del Centre Municipal de Vela.
El Gobierno ha aprobado esta semana un primer paquete de medidas de ahorro y eficiencia energética que recoge la obligatoriedad en edificios públicos, espacios comerciales y grandes almacenes, infraestructuras de transporte (aeropuertos y estaciones de tren y autobús), espacios culturales y hoteles de limitar a 27 grados el uso del aire acondicionado en verano y a 19 grados la calefacción en invierno.
También obligará a apagar las luces de escaparates y edificios públicos que estén desocupados a partir de las 22.00 horas y todas estas iniciativas tendrán una vigencia hasta el 1 de noviembre de 2023.
Collboni ha acusado al presidente de Rusia, Vladimir Putin, de «hacer chantaje a las democracias europeas» y ha defendido que tienen que hacer este esfuerzo para reducir el consumo y ser solidarios con los países del norte de Europa.